Se encerró en su habitación y se sacó la ropa para hundirse en la bañera, estar cerca de ella le afectaba, ver su rostro le traía los peores recuerdos de su vida, una vida que estaba marcada por la desgracia, miró sus brazos y las cicatrices que los cortes habían dejado en los mismos, había estado a punto de morir, esa ingrata mujer por poco logra destruirlo, cerró los ojos y un par de lágrimas se deslizaron por sus mejillas, era horrible vivir con el dolor del rencor en el pecho, con ese odio latente, pero ya nada importaba, estaba dispuesto a darle a Alessandra dónde más le duele, se encargaría de que ella pagara por todas las noches de sufrimiento, la arrastraría con él al abismo y la entregaría para poder liberarse de su castigo.
Despierta Alessandra.
Se puso el uniforme y bajó con Karina hasta el comedor para desayunar, la semana empezaba y la rutina de las clases también, buscó con la mirada a su misterioso hombre, pero este la ignoró.
-Lo vas a desgastar Aless.
- ¿Qué? -Preguntó sin entender-.
-Que vas a desgastar al director de tanto verlo, al menos disimula amiga.
- ¿En serio se me nota?
-Si ¿Te gusta?
-No -Mintió- yo...
- ¿Tú qué?
-Olvídalo.
-Te gusta -La molestó entre sonrisas-.
-Karina, baja la voz, estás llamando la atención de todos.
-Va, va, no diré nada aquí, pero hablaremos en la habitación, ahora vamos, hoy tenemos clases con Drac -Entraron al salón y la clase empezó, miró a Drac dictar su clase muy serio y mil cosas se le vinieron a la cabeza al recordar lo que había visto, pero lo que más recordaba era lo que habían hecho con Alessandro en su oficina, la forma en que la había tocado, uno a uno los profesores dictaron sus clases, y al igual que en el desayuno Alessandro la ignoró todo el tiempo, ni siquiera la miraba cuando ella le hacía una pregunta-.
-Al fin terminó el día, estoy agotada, quiero dormir un poco ¿Vienes Aless?
-Luego, iré por unos libros a la biblioteca.
-Ok, nos vemos luego entonces -Esperó a que se marchará y fue hasta la oficina del director, quería verlo y abrazarlo, quería compartir algo de tiempo con él-.
- ¿Necesita algo señorita Alessandra?
-No hay nadie cerca, las alumnas ya no están en las aulas -Dijo sentándose en una de las sillas-.
- ¿Qué quieres Alessandra?
-Yo quería pasar un poco de tiempo contigo
-No tengo tiempo, estoy ocupado -Respondió mientras ojeaba unas pruebas-.
-Si quieres puedo ayudarte -Se ofreció-.
-No necesito ayuda.
- ¿Pasa algo?
-No -Contestó de forma seca-.
- ¿Seguro?
-Si -Se acercó a él y lo tomó del rostro para darle un beso en los labios, beso al que él no tardó en corresponder, la sentó en su regazo y la abrazó por la cintura siguiéndole el juego, él también-.
-Te extrañé mucho.
-No exageres Aless.
-Es verdad, estuve pensando en ti todo el día.
- ¿Mucho?
-Sí.
-Pequeña, tengo mucho trabajo.
-Yo puedo ayudarte.
-No pequeña, porque mejor no vas y descansas un poco.
-Prefiero quedarme contigo ¿Puedo?
-Si puedes -Se abrazó a él y recostó su cabeza en el pecho de Alessandro-.
-Terminé, es hora de... -Bajó su mirada solo para percatarse de que ella se había quedado dormida, lucía tan tierna ahí, descansando abrazada a él, acarició su mejilla y besó su frente estrechándola entre sus brazos, a Alessandra le gustaba que le leyera y se sentaba en su regazo a oírlo, podían pasar horas frente a la chimenea juntos con un buen libro, hasta que ella decidió traicionarlo e irse con otro, su mundo se había caído a pedazos y había preferido entregarse a la oscuridad. La tomó entre sus brazos y la llevó hasta su habitación, era tarde y empezaba hacer algo de frío-.
-Me quedé dormida ¿Dónde estamos?
-En mi habitación.
-Creo que será mejor que vuelva a mi cuarto, Karina debe estar buscándome.
-Karina no está en el cuarto, lo más probable es que se haya ido con Zigor.
- ¿Te molesta que se involucren?
-Sería hipócrita de mi parte, ya que yo estoy contigo ¿Tienes hambre? ¿Quieres que te traiga algo?
-Un café está bien, gracias -Se dirigió a la cocina y preparó algo de café con unas galletas y se las dio-.
- ¿Puedo dormir contigo?
-Sí -Le sacó el uniforme y le puso una de sus camisetas para que estuviera más cómoda y se acostaron juntos a dormir, aunque la noche prometía algo más que un simple sueño para ambos, tal vez hoy sería una noche perfecta para empezar su venganza y comenzar con un castigo que tal vez no tendría fin para ninguno de los dos-.
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ALESSANDRO "MÁS QUE UN SIMPLE DESEO"
Romance🔥 ALESSANDRO 🔥 Alessandro es lujuria, es pecado, es aquello que solo puedes desear en lo más profundo de tus fantasías, es un sueño hecho realidad que puede convertirse en pesadilla. Capaz de conducirte al más amargo de los dolores, despiadado co...