Mundo Gris

CAPITULO 43.- Manzana podrida.

Muchas mariposas de llamativos colores revoloteaban en el invernadero.

El apuesto joven se encontraba en medio de todas ellas admirando su belleza, ya que todas tenían algo en común.

Todas tenían un llamativo color rojo.

- ¿Son tan hermosas... cierto? – Le pregunto a las personas que se ocultaban en la sombra.

- No tanto como usted, mi señor.

- Oh vamos... saben que no me gustan los halagos.- Él se rio y centro su vista en una en específico- Si... tan hermosas...- Estiro su mano y la desafortunada criatura se posó en sus pálidos dedos.- Y como toda belleza... es efímera- Rápidamente cerro su puño en torno al insecto y de inmediato encontró su fin. – Pero claro... solo la verdadera belleza perdura... perdura aun después de la muerte... cierto... mi reina roja. – El observo a través del ventanal que mostraba toda la ciudad sumida en el caos- Te espero con ansias... para dar nacimiento al nuevo mundo... mi pequeña y tonta mariposa.

*-*-*-*

Vladimir sostuvo el cuerpo inconsciente de Scary, mientras retiraba la aguja del pecho de esta.

« ¿Se podría decir... que he tenido suerte? Fue la jugada más arriesgada que he cometido en toda mi vida... y al parecer ha funcionado... »

Observo a cada uno de los presentes en la sala y como todos tenían expresiones diferentes.

El primero en actuar fue Mason al bajar su arma, sacar un petaca y tomarse un buen trago.

- ¡Jefe! ¡Nos encargaremos de estos traidores! ¡Por favor no se preocupe por estas... estas ratas!- Ariadna a pesar de estar furiosa no cabía en sí de alegría al ver a Scary en ese precario estado.

- Déjalo, Ariadna.- Vladimir cargo a Scary y se dirigió a la puerta- Mason... Lola, volved a vuestras posiciones, tengo una idea de las razones por las que habéis actuado así. Así que hagamos como que esto nunca ocurrió.

- ¡Ok!- Lola se encogió de hombros dio media vuelta y se fue.

- PE---

- Sabes que te respeto, Vladimir. - Mason se dio media vuelta- Pero hay cosas que no importa que tanto te respete o me importes... son mucho más importantes que la lealtad.

Vladimir suspiro.

- Lo sé, Mason, y sinceramente, aprecio que sigas apoyándome.

- No sé si haya una próxima vez... te he avisado y ya lo que ocurra no recaerá en mi conciencia. – Mason dio media vuelta y se alejó- Pero te aseguro... que ya yo hice mi elección, muchos aquí ya la hemos tomado. La pregunta es... ¿Qué harás tu cuando llegue el momento? – Solo se miraron unos segundos y Mason se perdió entre los túneles.

- ¡Jefe! ¡No-No lo entiendo! Esos... esos traidores atentaron contra usted. Hay... Hay que actuar Ya escucho a Mason, esta no será la última vez. ¡No puede solo dejarlos ir!- Ariadna esta histérica, y más al ver como su jefe protegía a la causante de todo esto.

- Ariadna. – Ella se paralizo por el tono de voz- ¿De verdad crees que eso cuenta cómo intento? Creí que ya tendrías una idea de contra quien acabas de enfrentarte. – Ella trago saliva recordando cierta conversación con la pelirroja- Si esto hubiese sido real, hace años que todos estuviésemos muertos, no digo que ustedes o yo seamos inferiores, pero cuando tienes un motivo tan fuerte como ellos... destruir el mundo se queda corto. – El observo a todos y a cada uno- Volved a sus puestos los que debáis de trabajar y dad una vuelta los que estéis libres. Y no bajéis la guardia.