Peter Pan's Property (Peter Pan)

Capítulo 38: "Cambio de perspectiva".

Luana Turner.

Quizás hayamos estado apenas un poco menos de diez minutos entre abrazos, mirándonos y no pudiendo creer que estuviéramos todos juntos nuevamente. Sentía una inmensa calidez entre la frialdad que sus cuerpos tenían, sentía esa conexión con ellos que era mágica e inegable.

Veía a mi madre, Elizabeth Swann, justo frente a mí y no podía entender cómo podía sentirme tan cercana y familiar a ella cuando falleció cuando tenía dos años y la mayor parte de mi vida no estuvo presente. Era igual de hermosa en esa foto que conservaba de ella, su sonrisa me transmitía una tranquilidad impresionante que era muy diferente a la vida de aventuras y adrenalina que tenía.

Y luego estaba William Turner, el apuesto y valiente pirata que, a pesar de no ser mi padre biológico, era una figura paterna muy fuerte para mí y siempre lo sería. Conservaba aquella brillante y paternal mirada que recordaba que tenía. No me gustaba ser tan sentimental, ni expresiva, pero todo estaba siendo demasiado.

Vine aquí buscando a Killian para regresarlo conmigo, porque no me daría el lujo de perder a alguien más, y de repente me encuentro con que Peter Pan está aquí. Y yo jamás hubiera esperado eso. Luego mis padres, a quienes jamás pensé volver a ver.

Tenía que admitirlo. En mi corazón nacía una necesidad de llevarlos a todos devuelta a la vida, porque los extrañaba. Y sabía que eso era lógico con Elizabeth, William y Killian, pero la situación de Peter era diferente pues se suponía que ya lo había superado, pero verle de nuevo y recordar de repente todos los momentos que pasamos juntos parecía haber cambiado algo, quizás mi perspectiva de las cosas.

Entonces me vi forzada a replanteármelo. Claro que era fácil superar a alguien cuando estás lejos y tienes a personas que te distraigan todo el tiempo. Entonces... ¿De verdad sentía lo que decía que sentía por Ben? ¿De verdad había borrado a Peter de mi cabeza?

―Has crecido mucho, cariño ―escuché la voz de mi madre mientras me separaba de sus brazos y observaba cómo ponía un mechón de mi cabello detrás de mi oreja, sonriendo con el rastro seco de sus lágrimas en el rostro.

―Y te has convertido en una hermosa y valiente pirata ―sonrió William.

―Capitana, en realidad ―saqué fuerzas para responder sin que mi voz flaqueara, mientras secaba mis lágrimas con el dorso de mi camisa―. Capitana del Jolly Roger.

―Estoy orgulloso de ti, Luana ―volvió a decir él―. Y lamento haberte ocultado la verdad por tanto tiempo.

―Eso no importa ―negué con la cabeza, acercándome un poco más a él―. Tú siempre serás mi padre, quien me enseñó cómo ser una pirata y apreciar lo que eso significa.

William vuelve a sonreír y toma mi rostro entre ambos mientras me mira con dulzura.

―Eres la persona que siempre supe que serías ―me dijo en un asentimiento de cabeza―. Dale un oportunidad a Killian, él es demasiado orgulloso para aceptar que tiene miedo a equivocarse contigo.

―Es un buen padre, algo idiota a veces pero es bueno ―sonreí con una sensación de picor detrás de mis ojos nuevamente―. Pero tengo que encontrarlo. Y llevarlo de nuevo conmigo, pero no sé cómo...

―Debes hacer un pequeño sacrificio, Lua ―dijo Elizabeth con voz tranquila, mientras los tres nos conducimos a babor del barco―. Tendrás que partir tu corazón por la mitad y entregárselo a Killian, pero eso no es todo. Alguien tiene que quedarse en su lugar, de lo contrario Hades no lo dejará irse. Por cada persona que deja éste mundo, debe entrar otra.

Me quedé pensando en ello. Si eso era lo que tenía que hacer para que Killian pudiera volver a la vida, lo haría. Sin importar que fuera yo quien tuviera que quedarse aquí, él lo valía, por supuesto. Y la lealtad y la validez eran las facultades más importantes que podrían existir para mí. Para los piratas en general.