Amor sobrenatural [Jelsa]

Capítulo 14

-¿Qué haces aquí? -me atreví a preguntarle a la chica pelirroja que desviaba su mirada de mi rostro al de Jack varias veces.

No tenía sentido que estuviera aquí. Que supiera dónde encontrarme, hace unas horas nos vimos por primera vez, ¿cuál sería su motivo para buscarme? ¿qué tengo de especial para ella?

-Necesito hablar contigo, Elsa -detuvo su mirada en mí y se me quedó viendo con un gesto de completa preocupación.

-Y...yo no te conozco. Ni sé qué tendríamos que hablar ahora mismo -respondí a la defensiva mientras trataba de soportar el dolor en mi pecho, que había vuelto de un momento a otro con solo ver a Anna.

Ella y yo conversábamos, pero Jack se mantenía colocado a mi lado sosteniendo mi muñeca con una fuerza innecesaria, como si pensara que escaparía, sabiendo muy bien que soy incapaz de lograrlo. A pesar de ser una criatura desconocida para mí, lograba sentir que estaba muy tenso y que no dejaba de ver a la pelirroja con molestia.

-Entiendo que esto es muy precipitado, pero es por tu bien, Elsa -continuó Anna, hablándome con total confianza, como si fuera mi amiga, y ya se sabe que les pasa a mis "amigas" -Estás en peligro.

Su confesión me sacó de balance. No entendía qué pasaba con ella. Podría creer que está algo loca, pero hablaba con una convicción y seguridad aplastantes. Algo no andaba bien con esa situación incómoda, en la que Anna sabía algo que yo no.

-¿Quién te crees para decir eso, niñita? -intercedió el vampiro con total enfado. Sentí su toque en mi mano cada vez más frío -Vete a casa, mocosa y busca algo más divertido qué hacer en lugar de molestarnos a tan altas horas de la noche.

El ceño de Anna se frunció, considerablemente, y sus manos se cerraron en puño, estaba furiosa. Contempló a Jack con el mismo enojo intenso que él a ella. Bastaba un abrir y cerrar de ojos para que ese par estallaran, y así fue.

-¡Vampiro insolente! -gritó la chica desconcertándome por completo.

Mi corazón continuó su marcha con una rapidez impresionante, sentía que se me iba a salir del pecho ante la sorpresa de saber que Anna conoce el verdadero origen de Jack. No me cabía en la cabeza la posibilidad de que ella hiciera parte de los cazadores porque Rapunzel nunca la mencionó cuando seguía con vida. Lo único que se me ocurría es que ella fuera otra vampira, enemiga de Jack, pero tampoco, los ojos de Anna eran azules no rojos.

Entonces... Podría ser parte de los lobos y por eso la rabia hacia Jack.

-Sabes que soy ¿eh? -contestó el vampiro de una forma que no me esperaba. Hablaba con burla -¿Qué harás ahora, pelirroja? -la retó.

-Alejarte de Elsa. Tú eres un monstruo y ella no merece estar contigo -escupió. Luego volteó a verme -Ella pertenece a otro lado, y tú lo sabes muy bien, vampiro estúpido.

-Bien. Tenía pensado irme ahora mismo, pero he encontrado una pequeña y molesta distracción -canturreo con cinismo, luego apretó mi mano otro poco, haciéndome gritar de dolor.

Ante eso, Anna lo observó con más enojo y, para mi absoluta sorpresa, alcancé a notar que sus iris cambiaban de color a uno más oscuro. Me quedó claro que no era cualquier chica.

Jack soltó mi mano sin cuidado, para luego colarse frente a mí, de modo que no pudiera ver a Anna, y extendió una mano frente a mí congelando mis piernas y dejándome inmóvil por completo. El frío caló en mi piel de una forma dolorosa e incómoda.

-Tú te quedas aquí, mientras tengo una linda charla con esa estúpida -colocó sus dedos en mi mentón y me dedicó una burlona sonrisa -Serás testigo de la muerte de otra de tus amigas -apretó mi rostro -Será divertido -me mostró sus afilados colmillos por última vez y se giró para encarar a la chica.