Capítulo 19

575 85 29
                                    

—¿De qué estás hablando? —fue lo primero que pregunté al escuchar su extraña confesión.

Todo mi cuerpo fue sometido ante una oleada de escalofríos provocados por lo que había dicho ese despreciable vampiro. Al principio creía que era broma; pero, era verdad, Aster seguía con vida, entonces Mérida y Rapunzel... ¿qué?

Mi cabeza estaba a punto de reventar, gracias a las teorías que tenía en mi mente que chocaban entre sí y resultaban simplemente imposibles. Yo vi morir a mis supuestas amigas— o por lo menos a Rapunzel, a Mérida la dejé abandonada en manos de Jack — no podían seguir vivas por más que lo deseara.

Vi como el peliblanco se levantó con elegancia del sofá en el que estaba y comenzó a rodearme como si se tratara de un depredador ante su presa. Lo estaba disfrutando como nunca, parecía un niño victorioso ante su travesura. Su sonrisa tan espléndida, solo me hacía sentir una profunda rabia hacia él.

—Verás, pequeña niña —empezó a hablar con un tono aterciopelado —Un día te conté que entre mis maravillosos poderes —sacudió su mano en el aire con gracia y hasta burla, luego rió —existe uno que es de mis favoritos, que incluso viste como usé.

Traté de hacer memoria. Es cierto que Jack tiene un abanico de poderes que puede usar como mejor quiera; pero entre tantos no sabía a cuál se refería.

—No entiendo —solté y frunci él ceño, desconcertada.

—Tú nunca entiendes nada, debe ser por la parte humana que todavía conservas —se burló de mí como solo él es capaz de hacerlo —Pero bueno, te explicaré —dejó caer su brazo sobre mis hombros —Soy un vampiro muy poderoso y lo sabes —me guiñó un ojo —Y tengo el poder de manipular la realidad de un ser humano, hacer que vean lo que yo quiera que vean.

Esa última frase caló en mi memoria tan rápido como la dijo. Y es que, ya me la había dicho en el pasado cuando se le ocurrió aparecer en mi clase. En efecto, es capaz de hacer lo que dijo, porque nadie lo pudo ver... Solo yo.

Entonces es posible que haya estado jugando conmigo...

—Todo este tiempo —terminé mi pensamiento en voz alta —Todo este tiempo me estuviste manipulando.

—Emm sí, pero mira que... —no lo dejé terminar porque de inmediato aparté su brazo de mi cuerpo y lo empujé hacia el suelo.

Jack cayó de espaldas contra el suelo, y sin pensarlo dos veces, me le trepé encima y tomé su costosa camisa entre mis puños. No sabía de donde había sacado la valentía para hacerlo, pero la sangre caliente me llegó a la cabeza y me impidió pensar con claridad.

—Quítame. Las. Manos. De encima —dijo con lentitud, amezándome de paso. Su mirada estaba puesta en mí y la mía en él, sin embargo yo lo miraba con mucha rabia —Suéltame ahora.

No quise hacerle caso, me mantuve quieta sobre su cuerpo y aprisioné sus piernas con las mías, fue lo único que se me ocurrió para retenerlo, pero sus manos estaban sueltas y con cualquier movimiento me podría lastimar.

—Elsa, estás jugando con fuego —mencionó enojado —y te vas a quemar. Suéltame o no respondo de lo que te haga.

—Me importa una mierda —respondí, sorprendida con lo que había dicho sin pensar. Jamás en mi vida había dejado salir una palabra así, pero lo estaba disfrutando mucho —Quiero que me digas ahora mismo qué me hiciste, y qué pasó con Mérida, Rapunzel y Aster.

La ferocidad en su mirada fue opacada por una mirada brillante y divertida. Él solo sonrió y pasó uno de sus dedos por mi pierna.

—¿Y qué me vas a dar si te lo digo todo? —susurró, de forma seductora.

Amor sobrenatural [Jelsa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora