Mayo de 2003
Laura no puede ser más feliz y abraza a su madre. Lo hace en el salón de la nueva casa de verano, una casa largamente deseada porque le garantiza volver todos los veranos sin tener que depender de la disponibilidad de su amiga Luisa. Acaban de darles las llaves y van a aprovechar el fin de semana para ver qué es necesario comprar antes de que acabe el curso y se trasladen a pasar todas las vacaciones.
Tan solo ha avisado a Luisa de su viaje, ha preferido no hacerlo con Fran porque sabe que vuelve a salir con alguien y no quiere ponerle en una situación incómoda. Después del último verano han decidido que se dejarán llevar, cuando tengan ganas y les apetezca, pero también cuando sean libres, respetando en todo momento que el otro puede rehacer su vida, en algún momento de forma definitiva.
Por eso, esa noche, cuando acuden al botellón en el Parque está nerviosa, porque sabe que puede encontrárselo y, aunque quiere verle, no sabe si le apetece hacerlo con otra persona. Luisa también sale con alguien, es un chico bastante simpático, se llama Álvaro y es un poco más mayor que ellas, estudia informatica.
Precisamente él llega con sus amigos cuando las chicas acaban de empezar a beber y Laura siente lo más parecido a un flechazo por uno de ellos. Lo siente cuando Luisa se lo presenta y le da dos besos. No es solo que sea guapo, es que huele tan bien... Jose, que así se llama, no para de darle conversación en toda la noche, de hecho, cree que ella también le ha gustado porque en el botellón no la deja ni un minuto, tanto que algunos de sus amigos empiezan a meterse con él.
- ¿Puedes dejar de acaparar a la chica? - le grita Álvaro desde el banco de enfrente - seguro que quiere hablar con alguien más
- A mi no me molesta para nada - le contesta Laura - de hecho me lo estoy pasando muy bien con él
- ¿Veis? - le pasa el brazo por los hombros - la chica sabe bien con quién quiere estar
Todos se ríen y cuando acaban el botellón se desplazan hasta uno de los locales en los que ya estuvieron el verano anterior dándolo todo. Allí es donde sucede, Laura está con su nuevo amigo bailando y tonteando, cuando siente alguien que tira de su brazo y la aparta, lo que no puede imaginarse es a quien se encuentra cuando se gira.
***
Fran está rojo de ira. No se puede creer que sea ella y que esté ahí tonteando con otro cuando a él ni siquiera le ha avisado de su viaje. Está enfadado, tanto que no mide y tira de su brazo con más fuerza de la que debe. Su cara de sorpresa le genera algo de satisfacción pero pronto cambia a algo que ya ha visto otras veces.
- ¿Estás loco? - le pregunta a gritos
- ¿Estás bien? - se acerca el chico con el que estaba
- Sí, está perfectamente y tú estás sobrando - le contesta el propio Fran de malas formas
Laura se gira hacia él y le dice algo al oido que lo tranquiliza y lo aleja, a continuación se vuelve hacia él
- Vamos fuera - le dice - no quiero dar espectáculo gratis
Laura se sienta en un banco y permanece callada, supone que esperando. Él tampoco sabe muy bien que decir asi que el silencio se instala entre los dos hasta que por fin se decide a romperlo.
- ¿Estás con él?
- Creo que no te importa...
- Claro que me importa, ¿cómo no me va a importar?
- Pues como a mi no me tiene que importar que tú estés con otras... es sencillo. Creo que nunca te he montado un numerito de este tipo
- Pero... ¿estás con él?
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El hilo invisible
RomanceLaura acaba de llegar a la ciudad y odia empezar de nuevo. Fran es el gracioso de la clase que odia ir al colegio. Una historia donde la amistad y el amor se dan la mano a través del tiempo y el espacio.