32. Joshua || Lentes

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Me sentía pequeña, sola y abrumada rodeada de gente que iba y venía preocupados de sus vidas, sumergidos en sus problemas sin mirar ni un segundo a su alrededor, sin poder levantar un poco la mirada de los aparatos tecnológicos que portaban hacia ...

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Me sentía pequeña, sola y abrumada rodeada de gente que iba y venía preocupados de sus vidas, sumergidos en sus problemas sin mirar ni un segundo a su alrededor, sin poder levantar un poco la mirada de los aparatos tecnológicos que portaban hacia todos lados como si fuera un hijo o una parte de ellos. Me encontraba perdida en este lugar que se hacía llamar mi vida, pero sinceramente no me sentía parte de eso, claro que no.

Era excluida de todas partes por mi poco interés en lo tecnología eligiendo por encima de todo y todos los libros de fantasía que siempre portaba, catalogada como una friki, nerd o cómo le quieran decir, pero sinceramente no me molestaba, porque era verdad y con la verdad no se pude luchar porque nunca la vencerás.

Suspire irritada al sentir cómo me empujaban levemente por el hombro al pasar a mi lado como si no existiera, como si esta masa de un metro con sesenta centímetros y cuarenta y cinco kilos no existiera, pasando de largo sin disculparse por el dolor que había provocado en la zona de mi hombro derecho. Rodeé mis ojos afirmando los lentes que habían caído levemente por mi nariz deslizándose como siempre a todo minuto del día, realmente los
odiaba, pero sin ellos veía el mundo como era, borroso y confuso.

Al visualizar a los lejos el letrero de la sala de música medio sonreí contenta sabiendo que allí me esperaba lealmente como nadie, mi chelo.

Apenas colocar un pie en la sala sentí como un peso gigante se me iba del cuerpo sonriendo feliz, pero todo se esfumó rápidamente por un fuerte golpe que recibí de la espalda que me botó al piso, menos mal que me giré con los pies mientras caía si no habría caído de cara en el piso y eso si que no sería lindo, pero desgraciadamente mis lentes volaron en el proceso. Cuando mi espalda golpeó brutalmente el piso frío del lugar solté un gemido de dolor, un cuerpo sobre el mío llamo mi atención, al no ver su cara claramente le toque los hombros con rapidez y al sentir un escalofrío por todo el cuerpo, saque mis manos rápidamente sintiendo como me faltaba el aire.

— Lo siento, lo siento, perdóname, estaba pasando, y yo no me fijé, perdón, enserio — se disculpo múltiples veces el chico para levantarse con cuidado, me senté en el piso sin poder ver bien ni siquiera mi propia mano que sostenía mi cuerpo — déjame, te ayudo — el amable chico de voz aniñada y nerviosa tomo mi mano libre levantándome sin mucho esfuerzo estando de pie en milésimas de segundo.

— Mis lentes — murmuré mirando todo el lugar, pero realmente no, porque no veía ni mierdas solo manchas de colores borrosas, caminé por el lugar chocando con algunas cosas con fuerza hice una mueca para agacharme y tocar todo el piso buscando.

— Oh, yo te ayudo, hey, tranquila — el amable chico me ayudó a levantarme nuevamente guiándome a una silla donde me sentó.

Me llamaba la atención, me gustaba la voz del chico desconocido, al igual que la calidez que transmitía en su toque mientras me ayudaba en el trayecto, pero había "algo" que se me hacía conocido, pero no lo suficiente para descubrirlo.

— Aquí están, Vera — fruncí mi ceño al escuchar mi nombre de su boca y veo su figura borrosa acercarse a mi colocándose frente a mi agachándose entre mis piernas y con cuidado colocándome las gafas sin que yo reaccionara en ningún momento sintiendo hipnotizada cayendo en cuenta quien era el chico. Apenas tuve los lentes puestos mire con lucidez al chico sonriente frente a mi, sus labios rosas abultados y su cabello ondulado desordenado como siempre.

— Gracias, Joshua — murmure sonriendo levemente.

— No es nada, pero... — el chico miro hacia otro lado sonriendo confiado meditando por unos segundos — quiero algo a cambio, ya sabes, te ayudé.

Fruncí mi ceño al igual que mi boca haciendo una mueca confundida y indignada ¿me estaba pidiendo algo por ayudarme? que hijo de su mamá — no haré tu tarea.

El chico negó divertido — quiero que tengamos una cita, tú y yo, bueno, y si quieren también tus lentes.

El chico negó divertido — quiero que tengamos una cita, tú y yo, bueno, y si quieren también tus lentes

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Sofiadaaholland

ONE SHOTS, Joshua BassettDonde viven las historias. Descúbrelo ahora