El reloj marcó las seis de la tarde, Tony no se había dado cuenta del paso del tiempo debido a lo ensimismado que estaba con el proyecto en el que estaba trabajando, hasta ese momento. Tras la ventana del estudio vio los rayos dorados del sol penetrar y dirigirse suavemente hacia el lienzo que estaba en el caballete. Sonrió nada más recordar que Steve solía sentarse frente a esa tela, que ahora contenía un paisaje todavía incompleto. "Steve", pensó y arrastró el teléfono celular que tenía sobre la mesa hacia él. Lo encendió y se dio cuenta que no tenía ningún mensaje de él, de hecho, ni siquiera había visto el mensaje que Tony le había enviado horas atrás, preguntándole si iría a comer. Había pensado que, quizás, estaba ocupado con sus últimas clases, exámenes y entregas de trabajos; por ello no le había dado mayor importancia y había comido solo con Jarvis. Pero a esas alturas del día, comenzaba a parecerle extraño que ni siquiera hubiera visto el mensaje. Probablemente, ya estaba en el bar trabajando, pero, a menos que se hubiera quedado sin datos y el bar sin WiFi, no encontraba una explicación para ello. No quería ponerse paranoico, pero Steve siempre le contestaba sin mucha dilación.
Se incorporó y salió del estudio. Jarvis estaba en el sofá doblando ropa mientras veía Downton Abbey en la pantalla de la sala. Tony lo interrumpió para preguntarle si Steve había llamado, pero como ya esperaba, la respuesta fue negativa. Se dirigió, entonces, a la cocina, encendió la cafetera y decidió llamar a su joven amante. Escuchó el tono de la llamada, dos, tres, cuatro veces, aguardó hasta que entró el buzón, colgó y volvió a marcar. Nada. Ahora sí estaba preocupado, se sirvió café y le dio un sorbo mientras ponderaba su siguiente movimiento. Estaba pensando cambiarse y dirigirse al bar, cuando su teléfono sonó. Creyó que se trataba de Steve, devolviéndole la llamada, pero en la pantalla apareció el nombre de la madre de éste. Extrañado, Tony contestó.
—Tony—dijo Sarah de inmediato—, Bucky nos llamó, vamos para allá. ¿Puedes decirnos cómo está?
Tony frunció el ceño, la voz de Sarah sonaba diferente, como si algo estuviera impidiéndole hablar con la naturalidad que él había conocido.
—Lo siento, Sarah—dijo tranquilamente, aunque algo le oprimía el pecho inexplicablemente—; pero no estoy seguro de saber a qué te refieres.
Sarah hizo una pausa.
—¿No te hablaron?
Tony negó. Y Sarah suspiró.
—Bucky nos llamó, nos dijo que recibió una llamada del hospital.
—¿El hospital? —Comenzaba a darle forma a aquel pesó en su pecho; y no le gustaba nada.
—Sí, Steve tuvo un accidente en su moto, está ahí, en emergencias.
Como si un agujero profundo y oscuro se hubiera formado de la nada bajo sus pies y hubieran tirado de él, fue como sintió Tony que lo arrastraba esa noticia. ¿Un accidente? ¿Cómo? ¿En qué momento? ¿Por qué no le habían dicho nada? Bucky y Natasha tenían su número.
—¿Qué?... ¿Cómo... está? ¿Qué dijo Bucky? ¿Qué fue lo qué pasó?
—No tenemos todos los detalles. Vamos en camino, Tony, ¿podrías adelantarte e informarnos?
Tony asintió y colgó. Por un momento se quedó en blanco. La noticia había caído como balde de agua fría sobre su cabeza. Había pasado demasiado rápido como para que pudiera asimilarlo con debía. Pero no podía quedarse quieto, salió de su entumecimiento y fue a la habitación por su chaqueta. Le comentó escuetamente a Jarvis lo que estaba pasando y éste decidió llevarlo al hospital, alegando que en el estado nervioso en el que estaba no era conveniente que manejara. A Tony no le importó, sólo quería llegar pronto al hospital.
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Sugar
FanfictionTony no está pasando por una buena racha en su matrimonio y sin proponerselo se embarcará en una aventura con un joven barman, quien en una sola noche ha cautivado su corazón. Pero su esposo no estará dispuesto a dejarlo ir tan fácilmente. Stony AU...