game store ;; rubegetta

ｄ ｉ ｅ ｚ

dissolve de absofacto se escuchaba en la muy iluminada tienda de videojuegos, hoy ha habido más clientes, como se puede ver en este momento, hay varios chicos caminando por los estantes llenos de cajas con personajes animados.

—esta canción es como para escucharla cuando andas todo disociado—dice un chico cuando pasa frente a rubén, quien frunce el ceño, viendo al chico ese.

aveces las personas son muy extrañas, piensa él.

y es que en los pocos días en los que ha estado trabajando aquí ha visto casi de todo y ha escuchado mucho más, no es que le guste escuchar conversaciones ajenas, pero tampoco es su culpa que algunas personas hablen tan fuerte.

en el local todo ha estado yendo bien, al menos para alex y su padre, porque rubén se ha dado cuenta de lo aburrida que es su vida, mucho más que antes.
aunque sigue sintiendo esa extraña incomodidad cuando se encuentra en la tienda y más cuando le toca cerrar, sigue pensando que son fantasmas.

y cuando la tienda se queda vacía, nuevamente, le habla a alex.

—oye alex—le llama a su amigo, que está fijándose en las maquinitas.

—¿qué? —lo voltea a ver.

—¿sabes qué era esto antes de que tu papá lo comprara?

alex se extraña ante eso.

—¿por qué?

—aveces siento vibras raras, se escuchará muy tonto, pero pienso que son fantasmas o algo.

el más pequeño se quiere reír, pero ve el rostro serio de rubén y se tiene que aguantar, pero se le ocurre una pequeña bromita.

—¿sabes? —se acerca al rubio—, mi papá me dijo que no te lo dijera, pero esto era antes como un lugar de culto o algo así, ¿ves la bodega de allá? pues ahí guardaban los cuerpos después de sacrificarlos. mi papá lo consiguió a buen precio por eso, pensábamos que era mentira todo eso, pero ahora no estoy seguro.

rubén siente cómo todo su cuerpo se tensa y un escalofrío le recorre por la espalda, quiere decir algo, pero las singulares risas de alex le interrumpen.

fue todo una broma, el rubio no aguanta y le tira una botella casi vacia de refresco en la cabeza a su amigo, haciendo que él se queje pero no deja de reír.

y por esa razón, odia todo, bueno no todo, pero eso es más fácil de decir, siempre lo toman como un tonto.