game store ;; rubegetta

ｃ ｕ ａ ｒ ｅ ｎ ｔ ａ ｙ ｕ ｎ ｏ

—oye rubius—llama alex.

—¿mmh? —musita el rubio.

—si fueras un gorila, ¿con quién querrías pelear? ¿con un oso o un rinoceronte? —le pregunta, mirándole atento.

rubén le voltea a ver con el ceño fruncido, ¿qué clase de pregunta fue esa? el que alex esté haciendo preguntas extrañas y wonderland de caravan palace en los altavoces de la tienda, le hacen sentir mucho peor.

—contigo, supongo—le responde.

—vale, con el rinoceronte—asiente alex, volviendo la mirada a su móvil.

el rubio sabe que está haciendo uno de esos tontos test de internet, siempre lo hace cuando está demasiado aburrido, como lo está ahora.

hoy casi no ha ido tanta gente a la tienda, como es usual, para rubén eso está bien, menos gente con la cuál interactuar siempre es mejor.

—voy al baño—avisa rubén, recibiendo sólo un asentimiento por parte de alex.

camina hasta el baño, sólo va a lavarse un poco la cara y ya.

se queda mirando su reflejo, viendo como unos cuantos de sus tantos cabellos rubios le caen por la frente.

no sabe por qué, pero ahora siente que todo es extraño. en primera, desde hace unos cuántos días dejó de sentir a sus "fantasmas" y en segunda; samuel lleva tres días sin pisar la tienda de videojuegos.

no es que se haya acostumbrado a él, sino que ahora es algo raro que no haya alguien molestando, según rubén.

y aunque trata de ignorar todos esos absurdos pensamientos, no lo puede hacer del todo, porque todo está tan calmado y aburrido que más de una vez se ha quedado sumido en su propio mundo.

lo único que sigue igual es su semblante serio, porque por dentro está hecho un lío y sigue tratando de no darle importancia.

se seca el rostro y decide salir del baño, para seguir ocupando su puesto de trabajo.

al irse acercando al lugar donde estaba antes escucha unas voces; la voz de alex y de alguien más que no lo logra reconocer y no lo hace hasta que llega y ve de quién se trata.

—hola rubén—le saluda un risueño pelinegro.

rubén le regresa el saludo con un simple asentimiento de cabeza.

—¿qué tal estás? —pregunta samuel amablemente.

—mmh, bien—responde.

es que rubén no puede evitar ser tan cortante, pareciera que eso lo trae en las venas.

samuel se rasca la nuca, mirando hacia otra parte. tan sólo no fue a la tienda unos cuantos días y pareciera que el avance que tenía con el rubio se retrasó todo un año.

—¿me ayudas a buscar un videojuego? me lo han recomendado y dicen que está buenísimo—dice samuel, volviendo a mirar al otro.

rubén mira a alex, quien está muy entretenido en su teléfono que ni siquiera les pone ni un poco de atención, así que no hay de otra que hacer su trabajo por él.

él asiente y va detrás del pelinegro, para así poder ayudarle a buscar su videojuego.

igual tampoco le molesta tanto.

sólo es para terminar de ser agradecer por todo, eso supone rubén, ignorando el hecho de que en él ha llegado una extraña pero tranquila sensación. y claro que es por ver al pelinegro, pero no está dispuesto a aceptarlo.

💢; ya me acordé qué quería decir hace no sé cuánto tiempo xd

q me recomienden rolas pq yo ya no sé q chingados poner, porfas, grax 😎👍🏽