game store ;; rubegetta

ｖ ｅ ｉ ｎ ｔ ｉ ｔ ｒ ｅ ｓ

alex se encuentra en el recibidor de la tienda de videojuegos, golpeando este con sus dedos al ritmo de glad you came de the wanted. hasta que ve algo del otro lado de la calle, robandole su atención.

hoy no ha habido tantos clientes y el día ha estado algo tranquilo, sobre todo para rubén, que desde "ese día" se ha sentido mejor, porque sus fantasmas ya no están, o sea que ya no los siente y para él eso es algo bueno.

aunque ahora el único que le molesta es alex, pareciera que ese es su trabajo y lo hace mejor que atender gente, eso es lo que piensa rubén.

el rubio camina por los estantes llenos de videojuegos y va mirando a los personajes, pensando que antes eso le volvía loco y pasaba todo el día jugando frente a la play, pero eso ya quedó atrás, porque ya no le llama la atención. y sí, hasta él piensa que nada le llama la atención. nada.

—oh rubius—escucha a alex venir hacia él.

rueda los ojos, pero luego se pregunta por qué dejó su puesto, asomándose hasta donde cree que viene el menor.

—pero qué... —está por decir rubén.

—te traje un amiguito—le dice alex, mientras sonríe y sostiene del brazo a un chico.

rubén no dice nada, porque le viene un recuerdo a la mente, el día en el que su padre dijo exactamente lo mismo, trayendo consigo a un niño con las mejillas infladas y un flequillo cayendo en su frente, interrumpiendo su extraño, por no decir feo, dibujo.

ese niño era alex, el único que ha estado soportandolo por años.

—holi—saluda el otro chico.

rubén sale de su mundo y mira al que ha hablado, frunciendo el ceño.

—¿qué pasa? —pregunta el rubio.

—pues nada, yo sólo... hago mi trabajo—dice alex—, hasta la próxima.

y el más pequeño de los tres se va por donde vino.

cualquier otro trabajo que no tenga que ver con la tienda, lo realiza de maravilla, piensa rubén.

—¿ajá? —dice él, llamando la atención del pelinegro.

—hola, soy samuel—habla rápidamente el otro.

y rubén quiere decirle "¿a qué hora te pregunté?", pero se contiene.

da un largo suspiro, la verdad es que tampoco tiene algo mejor que hacer, es su trabajo, ¿no?

—hola samuel, ¿qué se te ofrece? ¿necesitas ayuda en algo? —pregunta rubén.

y lo que no sabe es que el chico de en frente se está muriendo de emoción por el sólo hecho de estar hablando con su crush.

💢; humildemente les agradezco su apoyo a esta fic😔✌
no pensé q alguien le fuera a poner atención y así, pero grax, otra vez ;)

y no, no les voy a dar 500 varos :)

mevoyatragarconpermiso