Libro 1 | Saga Elementos | Fuego: La Hija del Fénix

Capítulo 28: Tú y yo parte 2

Bueno, aquí les dejo otro capítulo con contenido maduro y picante 😏🔥 después de este la historia se pondrá más interesante todavía 😏, obviamente lo ocurrido en el capítulo pasado 😏 será muy importante. Como sea disfrutenlo y dejen volar su imaginación 😏🔥😏

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*Jordan

Sin lugar a dudas este fue un gran día, pero quedamos agotados. Regresamos al hotel y fuimos directo a nuestros cuartos, era casi medianoche. Jessica nos dio las buenas noches y entró a su habitación. Me tiré en la cama y puse las noticias, aunque Amy me había asegurado que no había peligro, quería estar completamente seguro de que la policía no nos buscaba fuera de Kansas City. Sintonicé el noticiero CNN de la noche, pero igual que pasó esta mañana, no hablaban de nada interesante aparte de chismes de celebridades famosas y escándalos deportivos, totalmente aburrido, aun así esperaba que en algún momento aparecieran nuestras fotos con el aviso de: "SE BUSCA" como encabezado principal. Mientras esperaba esto Amy salió del baño, mi novia solo usaba una bata lo cual llamó mucho mi atención, no solo por lo sexy que se veía, sino también porque ella siempre lleva la ropa que va a usar después del baño, aun así era una muy buena vista:

- ¿Todo bien preciosa? – Le pregunté con ironía mientras ella escarbaba y rebuscaba en su maleta.

- Si, solo olvidé mi ropa – Me respondió con algo de fastidio – Soy capaz de controlar el fuego, ayudé a entrenar a uno de los legendarios Elementales, maté a dos Oscuros el mes pasado, pero olvido mi pijama para después del baño, definitivamente soy un desastre.

- Un desastre muy sexy – Le dije mientras la escaneaba con la mirada.

- ¿Sabes? Incluso después de humillar a ese tipo en el Dance Dance Revolution aún tengo mucha energía tigre – Me gusta a dónde va esto – Quizás puedas ayudarme a quemar esa energía extra – Si estoy soñando y alguien que no sea Amy me despierta puede darse por muerto.

Justo cuando iba a besarla escuchamos un pequeño grito que venía de la otra habitación, la habitación de Jessica y Amelia. Nos miramos muy confundidos, esa parecía la voz de Amelia aunque quizás no haya sido nada, tal vez algún insecto que pasaba por ahí la asustó, ese fue mi primer pensamiento, pero después escuchamos otro grito, esta vez fue la voz de Jessica, ahí empecé a preocuparme de verdad. Me levanté de la cama y agarré la llave maestra del hotel, pero cuando me disponía a abrir Amy me tomó la mano y me impidió salir, yo volteé a mirarla confundido ¿Acaso ella sabía la razón de esos gritos?:

- No creo que haga falta ir a ver – Me dijo muy calmada y con una sonrisa conspirativa.

- Podrían estar en problemas – Contraataqué muy confundido por su actitud.

- El que se va a meter en problemas eres tu tigre, no quisiera tener que llevarte al hospital por desmembramiento o quemaduras de tercer grado – De acuerdo, no entiendo nada de esto.

- ¿Qué está pasando Amy? – Le pregunté esta vez con un tono más serio.

- ¿De verdad tengo que explicarte esto? – Un momento, no me digas que... – Seré clara Jordan – Su tono cambio de burlón a serio en un instante – Es muy posible que tu hermana esté teniendo sexo con Amelia en este mismo momento.

Mis sospechas se confirmaron en un instante, sentía que mi cerebro iba a explotar. Mi hermana, mi hermanita, quien es capaz de quemar un edificio solo con tocarlo, está teniendo su primera vez con una chica que es capaz de crear un tornado solo con agitar sus dedos. Por un momento pensé en decir que era imposible, pero después empecé a sumar dos más dos y supe que era verdad. Jessica se notaba más relajada junto a Amelia, se reía ya sea de una de sus bromas o de algo que le pasará a ella, el primer día del entrenamiento apareció con un atuendo muy revelador, atuendo que hizo sonrojar a Amelia en más de una ocasión y por lo que me contó Amy, durante su "viaje de compras" esas dos se sonrojaron mucho en varias ocasiones, aunque tenía la evidencia frente a mí seguía negando que fuera verdad, pero después escuchamos otro grito de Jessica y después otro de Amelia, seguidos de unos gemidos apenas perceptibles. Ya no se podía negar lo que pasaba en ese cuarto, tuve que sentarme un momento para poder terminar de digerirlo: