CAPÍTULO 15

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Nos encontrábamos llegando a uno de los mejores edificios con departamentos de todo Londres, sólo bastaba con ver la fachada para darse cuenta de lo lujoso y caro que era

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Nos encontrábamos llegando a uno de los mejores edificios con departamentos de todo Londres, sólo bastaba con ver la fachada para darse cuenta de lo lujoso y caro que era. Era de esperarse, el señor Taylor es empresario. Pero no era el único edificio, pues se encontraban varios edificios más alrededor, al parecer era una zona algo privada. Quise suponer que el dueño de estos departamentos era el señor Deacon.

Nos adentramos a un estacionamiento subterráneo que poseía dicho edificio, para posteriormente descender del auto y luego poder montarnos a un elevador que había en el estacionamiento subterráneo el cual nos llevaría a nuestro destino. Roger presionó el botón hacia el último piso. Las puertas del ascensor se abrieron y caminamos por un amplio pasillo, aproximadamente unos 10 metros, hasta llegar a una puerta lisa en color negro mate, con el número 80 justo en medio de la puerta. Roger introdujo la llave por el picaporte de la puerta para después dejarme entrar primero, como buen caballero que es. Al entrar todo se encontraba oscuro, hasta que Roger encendió las luces y pude ver que era nada más y nada menos que un penthouse.

Desde la entrada de la puerta, se podía apreciar una enorme ventana que daba una vista increíble a toda la ciudad.

Me dirigí hacia aquella gigantesca ventana, para poder apreciar la inigualable vista que poseía. Pude notar que nos encontrábamos al otro lado de la ciudad. Me encontraba sumamente sumergida observando toda la ciudad de noche por medio de aquel cristal, hasta que de pronto sentí los brazos masculinos de Roger rodear mi cintura por la parte de atrás.

Percibía la tibia respiración de él sobre mi cuello, eso hizo que se me erizara por completo la piel, y todavía más, ante aquel roce de sus delicados labios posándose mi cuello, haciendo que me estremeciera por completo. Sólo cerré los ojos y eché mi cabeza hacia atrás dejándola caer delicadamente sobre el hombro del señor Taylor. Me dejé llevar por aquel momento. Hasta que él decidió hablar.

—Antes que nada —hizo una pausa—. Quiero que sepas que este penthouse será para cada ocasión que nos veamos —murmuró cerca de mi oído.

Volteé inmediatamente a verlo.

—Toma —dijo entregándome las llaves de aquel lugar—. Puedes disponer de él, si gustas puedes cambiar la decoración o hacerle algunos arreglos.

No sabía que decir, esto era demasiado. No quiero que vaya a pensar que estoy con él por su dinero, porque evidentemente no es así. Estoy con él por como es, no por lo que tiene.

—No sé qué decir. No quiero que pienses que sólo estoy contigo por conveniencia —dije algo triste.

—Ma chère, cuándo conozcas cuánto vales, dejarás de preocuparte por todos estos lujos —susurró en mi oído y dejó un húmedo camino de besos que iba desde mi mejilla hasta mi cuello.

Me dejé llevar por ese momento, aquellas relajantes y excitantes caricias que brindaba sobre mi espalda desnuda debido al escote del vestido, no tenía explicación alguna. Sentía que estaba tocando el cielo con el simple roce de sus dedos sobre mi cuerpo.

Young and beautiful •|Roger Taylor y ______|•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora