CAPÍTULO 31

734 45 202
                                    

Perdón por aprender a quererte tanto en tan poco tiempo, pero eres aquello que nunca busqué, pero que siempre necesité

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Perdón por aprender a quererte tanto en tan poco tiempo, pero eres aquello que nunca busqué, pero que siempre necesité. Había estado acostumbrada a que hombres de mi edad que ni siquiera saben lo que quieren me pretendieran, pero nunca terminé cayendo en sus redes como sucedió contigo, escupí hacia arriba sin saber que algún día podría caer. Intenté huir de México y de ese tipo de hombres para encontrarme aquí en Londres con lo mismo, pero con una versión más masculina y madura.

Eres ese pozo sin fondo en el cual me aventé y ya no hay escapatoria, soy peor que una adicta a las drogas, soy manejada como una marioneta por ti, toda yo te pertenezco.

Eres toda una exploración porque estás hecho con el espacio exterior, porque la calidez que embriagan tus labios son como el borde de la galaxia, y que decir de tus besos, estos son exactamente del mismo color de una constelación. No sé si dejarte ir o seguir intentándolo, lo que sucede es que siento que es necio esperar algo que sólo duele por dentro, aunque también sería algo estúpido dejar que se me escape de las manos lo que he empezado a amar.

Y no es que yo sea débil o una cobarde, lo que sucede es que todo tú eres mi debilidad, eres ese mismo magnífico efecto alucinógeno que provoca el LSD, porque alteras el sentido del espacio, la distancia y el tiempo, provocas en mí sensaciones extrañas y emociones fuertes que desconocía de mí misma, nunca hubiera imaginado que una persona fuera capaz de sentir todo esto.

Eres la única persona que puede alterar mi capacidad de juicio y comportamiento porque haces que cada vez que te consuma me encuentre a mí misma, eres tan placentero como peligroso ya que haces provocarme viajes malos y desagradables en donde me sumerjo en pánico, confusión y tristeza.

Y qué decir de lo que ocasionas físicamente en mí; aumentas con facilidad mi frecuencia cardíaca cada vez que me observas con esa hipnotizante mirada, cada vez que te observo estoy tratando de entenderle a tus ojos el misterioso encanto de tu mirada. Todas las palabras que me dices pueden estar llenas de falsedad o de arte; pero algo en mí me indica que tu mirada es el lenguaje de tu corazón.

Y nos dieron las diez y las once, las doce, la una, las dos y las tres de la mañana, y desnudos al amanecer nos encontró la luna, nos dijimos hasta pronto, ojalá y volvamos a vernos. El otoño acabó mientras el invierno estaba por comenzar.

—Hasta pronto, Ma Cherie... —murmuró Roger a centímetros de mi rostro.

Por última vez me eché a la perdición en esa mirada que te besa el alma, no quería decirle adiós, pero sé que sólo será por un corto tiempo.

—Hasta pronto... señor Taylor —añadí.

Cerré los ojos para ser besada por la única persona que hace alterar todos mis sentidos, ese beso lo sentí como si hubiese sido el primero, quiero besarte eternamente los labios y susurrarte en ellos lo mucho que me encantas, lo mucho que en este tiempo has cautivado en mí.

Young and beautiful •|Roger Taylor y ______|•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora