CAPÍTULO 22

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Extrañar a Roger es el precio que estoy pagando por vivir momentos inolvidables con él, tan sólo ha transcurrido algunos días y ya anhelaba volver a tocar ese fino rostro, volver a sentir esos ardientes labios recorrer mi cuerpo y una otra vez sin...

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Extrañar a Roger es el precio que estoy pagando por vivir momentos inolvidables con él, tan sólo ha transcurrido algunos días y ya anhelaba volver a tocar ese fino rostro, volver a sentir esos ardientes labios recorrer mi cuerpo y una otra vez sin descanso alguno.

En estos momentos no tengo tiempo para mí, estoy tan estresada con los tareas, trabajos, exposiciones y proyectos de la universidad, cada vez se empieza a poner más pesado, incluso en algunas ocasiones me he quedado a altas horas de la madrugada estudiando y haciendo tareas, pero sé que todo sacrificio valdrá la pena. Y a eso vine a Oxford, a estudiar, a desenvolverme, no a quejarme ni a llorar.

Estaba sumergida entre la pila de textos que tenía que estudiar para mi exposición de mañana, en verdad no comprendo cómo es que hay compañeros que no se toman la universidad en serio. Mi celular comenzó a vibrar y contesté sin fijarme a ver quien era.

—Ma chère... —articuló aquella voz que anhelaba escuchar. No pude evitar cerrar los ojos cuando me dijo aquel apodo.

—Roger —exclamé emocionada—. No sabes cuanto me alegra oírte —y es que el haber escuchado su voz, hizo a que mi estrés disminuyera y mis nervios se calmaran, era mi antídoto ese hombre.

—Lo sé, por eso decidí llamarte —comentó feliz—. Quiero invitarte a salir esta noche.

—Hoy es jueves —dije con obviedad, pues probablemente no se había percatado del día en que estábamos.

—Ya sé, quiero invitarte a cenar al restaurante donde tuvimos nuestra segunda cena —comentó. Inmediatamente recordé aquel restaurante elegante y distinguido.

—Eso significa que debo de ir formal.

—Con lo que te pongas eres perfecta —expresó con total sinceridad. Haciendo a que mis mejillas se sonrojaran, me encanta la forma en me hace sentir segura, y eso es algo que a los patanes que se han atrevido a pretenderme no hacen—. ¿Por qué no usas uno de los vestidos que te obsequié? No dudo que se te verá estupendo.

—Está bien, me iré a alistar para usted, señor Taylor —escuché como soltó una risita traviesa.

—Te veo dentro de dos horas.

—Ahí estaré —finalicé la llamada para irme a alistar rápidamente.

Escogí un elegante vestido entallado hasta las rodillas, dicho vestido contaba con un escote en "V" haciendo resaltar un poco mis senos, aquel vestido era perfecto para el fresco clima de esa noche, era de manga larga. Era sencillo pero elegante. Me metí a duchar rápidamente, dejé que las gotas de agua empezaran a recorrer mi tibio cuerpo, cerré los ojos y me puse a pensar lo que sucedería esta noche. Constantemente, Roger se atravesaba en mis pensamientos, sea lo que estuviera haciendo en mi mente estaba él, ¿será que me estoy encariñando de él? De ser así sólo espero y sea cariño, porque si llego a sentir emociones demasiado fuertes hacia él, dudo mucho que me corresponda de la manera en que imagino.

Young and beautiful •|Roger Taylor y ______|•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora