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COMPLICADO








¿Yo? La boluda del año.

Aún así, asiento, abriendo más la puerta y lo invito a pasar para girarme y caminar hacía mi heladerita pensando si éste me estaba jodiendo o qué.

—Che, bastante lindo tu depa, mejor que el mío y limpio. —lo escucho decir detrás mío, me giro a verlo y estaba en el medio de lo que se podría llamar sala mirando el puf.

Tenía suerte, había hielo.

La única persona que hizo hielo fue Joaquín hace dos semanas con una botella de jugo que compró, pero era chiquita.

—¿Te sirve? —cuestiono caminando hacía él, Valentín me mira a mi y mis pies descalzo para recién después mirar el hielo y asiente.

—De una, ¿Saliste? —cuestiona de repente agarrando la botella y me agradece—. Gracias.

—Algo así, pero me vine antes, me aburría. —le cuento y no sé todavía que carajo hace.

¿Me está tomando el pelo no cierto? El vió mis historias, me di cuenta de eso después de que me siguió y yo lo seguí. Si, no lo seguía antes. Así que su pregunta era muy estúpida.

—Ah. Perdón que te jodi —señala a la botella para comenzar a salir solo de mi departamento.

¿Posta, posta me está cargando?

15 minutos atrás casi me comió la boca y ahora se alejaba así, no entendía. O era autista. O solo pelotudo.

—Con unos amigos estamos arriba... Tomando... —comienza sin saber dónde puede terminar esto, lo espero mientras me apoyo por la puerta—. Algo, si por ahí querés ir.

Sonrío negando levemente para poner un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.

—Gracias pero cuando no conozco muy bien a las personas y me invitan a hacer algo pasa como lo de hoy, venirme antes.

—Ah —sonríe algo diferente a qué antes y asiente cerrando sus labios—. Está bien, te dejo que descanses entonces...

Le sonrío aún perdida por esta situación parecía que el pibe que no me quería dejar que suba era otro a éste.

—Descansa, patito. —suelta retrocediendo y no puedo evitar que me salga un «¿qué?» del alma, el larga una carcajada y me señala, me miró y entiendo que es por mi vestido amarillo—. Te queda lindo, igual.

Me pongo roja, seguro y el se gira después de reírse y sacar la lengua para subir las escaleras.














tercer piso | wosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora