Para suerte de Garry al bajar a la sala de entrenamiento, se encontró con que estaba vacía, así que colar a la princesa dentro resultó de lo más sencillo.
Ella ya llevaba unos pantalones así que solo tuvo que tomar una camisa que le quedaba grande que Garry le ofreció, tuvo que hacerle un nudo en la espalda para conseguir la ropa adecuada para el entrenamiento.
Garry no estaba seguro de que esperar así que le propuso hacer un circuito al rededor de la sala, un par de vueltas corriendo, equilibrio y trepar una pared con una soga.
Nunca había entrenado a una mujer en la guardia, tenía compañeras que tomaron el cargo de guardias, pero eso había sido después de que él y Andrew terminaran su entrenamiento y él casi nunca las miraba, pues ella solían estar en la cuidad, pocas veces se las topaba para entrenar.
Así que le pareció que una carrera le haría bien a la princesa. Él sabía que tenía unas piernas muy fuertes, era delgada, pero su cuerpo aún tenía músculos marcados, no es que él se hubiera fijado realmente en el cuerpo de la princesa, pero no podía obviar ciertas cosas, no cuando la había visto hacer esa largas caminatas, o cuando ella había estado montando a caballo los últimos días.
Y para nadie era un secreto que la princesa y sus hermanos, habían pasado los últimos tres años recorriendo el país buscando un lugar seguro, así que él podía apostar que la princesa tenía una resistencia muy buena.
Y durante la carrera solo pudo confirmar aquello, al principio trato de ir despacio para estar atento a ella, no quería recibir otro regaño de su amigo, aunque estaba seguro que Andrew le daría un tremendo sermón solo de saber que él había aceptado llevar a la castaña a ese lugar.
Ella hizo muy bien la primer vuelva del circuito ni siquiera se quejó, así hicieron tres vueltas más, para cuando llevaban ya varias vueltas, Garry comenzó a quedarse atrás mientras ella se adelantó hasta que dejó a Garry en la última prueba.
Y así fueron repitiéndolo, Eiden terminó cubierta en sudor y se tiró sobre los colchones a tomar aire, ella realmente había hecho todo. Garry no podía estar más que sorprendido de lo bien que ella lo había hecho.
La castaña estaba tirada con el cabello recogido y su pecho subía y bajaba. Una extraña calma brillaba en los ojos de ella, mientras Garry iba por un poco de agua para ambos, se sacó la camisa y la colocó sobre su hombro.
Un grupo de cinco guardias entró entonces. Eran todos chicos en entrenamiento, Garry los conocía los había visto entrenar antes.
La chica ni siquiera se movía y él pensó que quizás estaba dormida. Sería difícil sacarla de la sala si ese era el caso.
―Hola Garry ―habló el primero de ellos, un tipo de la altura de Garry. Él solo inclinó la cabeza en una especie de saludo.
Entonces su mirada al fin reparó en la chica tendida en el suelo.
―Pensamos que la sala estaría sola, pero veo que la has estado usándola ―comentó el mismo chico ―No sé qué pensaría el general si llega a enterarse de esto.
Garry se detuvo. ¡Mierda! Ellos le dirían al general de la presencia de la princesa.
―Si realmente querías hacerlo, hubieras buscado un mejor lugar que las colchonetas, no se quizás a la próxima tu y tu zorra podrían buscan una habitación.
Garry entonces entendió la lógica que la mente del chico había seguido, y por las miradas de los otros, ellos también pensaban aquello. La princesa había dejado su ropa junto a la puerta cuando se había cambiado.
Garry estaba a punto de decirle al chico que acaba de firmar su renuncia con aquellas palabras.
Pero la chica en el suelo se puso de pie. Y Garry deseo tener una cámara para tener un recuerdo de la cara del chico cuando vio a la princesa. Nunca pensó que alguien pudiera lucir más pálido que los chicos en ese lugar.
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Vuelvo A Casa (Primera parte trilogía Arde)
RomanceEiden ha sobrevivido a un mundo destruido por la naturaleza, ahora debe enfrentar un mundo que comienza a reconstruirse en nuevos reinos. Ser nombrada princesa no será fácil y menos cuando ella oculta muchas cosas, las personas que rodean la corte d...