𝖂𝖆𝖗 𝖔𝖋 𝕳𝖊𝖆𝖗𝖙𝖘 『II』☾⃟ N. Mikaelson [ᴇsᴘᴀɴ̃ᴏʟ ]

Thirty Five

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Wᴀʀ ᴏғ Hᴇᴀʀᴛs

[𝙲𝚑𝚊𝚙𝚝𝚎𝚛 𝚃𝚑𝚒𝚛𝚝𝚢 𝙵𝚒𝚟𝚎 - 𝕷𝖔𝖔𝖐 𝕬𝖋𝖙𝖊𝖗 𝖄𝖔𝖚 ]

"will you, won't you be the
one i'll always know?"

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Elijah estaba sentado en el porche de la casa de los Mikaelson con Hope y Kaiden, cada uno sentado en su silla de bebé. El mayor Mikaelson vio con asombro como los gemelos se arrullaban, riéndose ligeramente cuando Kaiden soplaba frambuesas haciendo sonreír a Rebekah mientras colocaba leña en el patio, ―Está bien, Elijah. No se romperán. Todo lo que hiciste fue en nombre de protegerlos. No estoy preocupada.―

Ante el estímulo de Rebekah, Elías sonrió mientras levantaba a Kaiden de su asiento, ―Hola problemas, ―el original saludó suavemente mientras colocaba una mano sobre las pequeñas de Hope, sonriendo mientras la niña le agarraba el dedo. ―Hola, cariño ―Elijah arrulló a la bebé Hope antes de volver a prestar atención a Rebekah mientras Kaiden jugaba con su corbata, ―¿Es eso lo que creo que es?―

Rebekah sonrió mientras caminaba hacia Elijah y los gemelos, sacando a Hope de su asiento y sosteniéndola mientras asentía con la cabeza a su hermano, ―¡Es temporada de fogatas! Y estoy reviviendo una tradición familiar! Especialmente porque vamos a estar todos juntos. ―Elijah puso los ojos en blanco mientras continuaba preocupándose por el bebé en sus brazos que parecía estar sólo interesado en su corbata.

―Sólo porque estamos huyendo de uno de nuestros padres trastornados. Otra tradición del Mikaelson. Es algo peculiar nunca estar cansado, pero siempre agotado por la similitud de las cosas. ¿Por qué nuestra familia siempre está en guerra? ―Preguntó Elijah retóricamente, con un tono que mostraba el agotamiento que sentía. Sin embargo, a pesar de su amargura, Rebekah siguió sonriendo.

―No lo sé. Pero estar lejos de ellos me hizo ver las cosas de forma diferente, ―admitió la rubia mientras Hope tiraba un mechón de cabello rizado y Kaiden chupaba la punta de la corbata de Elijah. ―No somos tan malos. No somos los monstruos que nuestros padres creen que somos, ―habló Rebekah, bajando la voz mientras hablaba directamente con Elijah, Hope y Kaiden.

En ese momento, una todoterreno negro se precipitó por el camino de entrada con Thea saltando de él urgentemente antes de que Klaus tuviera la oportunidad de aparcarlo. La Lockwood corrió por el resto del camino de entrada hacia Elijah y Rebekah, deteniéndose en su camino tan pronto como vio a sus hijos felizmente en sus brazos. Los hermanos le sonrieron cuando Klaus finalmente la alcanzó, mirando a sus hijos con una incredulidad abrumadora.

Elijah se puso de pie, entregando un sonriente Kaiden a Thea, quien casi se echa a llorar en el momento en que sostuvo a su bebé en sus brazos. ―Hola, ―la morena arrulló al bebé que le sonrió, sus grandes ojos color avellana la miraban con asombro mientras buscaba un mechón de su cabello caído. Thea se rió suavemente mientras miraba hacia Rebekah, que aún tenía a Hope en sus brazos antes de mirar por encima de su hombro a Klaus.