10.

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La chica había llegado a Grinddy's Doughnuts, parecía ser que Cinco se encontraba ahí adentro, ya que su localizador lo indicaba. Miró el local por unos segundos, para luego ver que este se convertía en una campo de batalla, donde Cinco los empezaba a matar.

Ella simplemente espero recargada en el auto de Cinco, observando como los mataba mientras comía las galletas que James le había dado. Cuando termino, pasaron unos minutos antes de que él saliera, pero un niño de 13 años fue el que salió. Vio como tiraba su localizador y se empezaba a acomodar su corbata, pero se detuvo cuando vio a la chica recargada en su auto.

—Buen truco, ya no eres un viejo —habló ella—. Incluso diría que eres lindo —dijo con burla.

—Quítate de mi camino a te ocurrirá lo mismo que a ellos —la amenazo Cinco.

—Juguemos, anciano.

Sin esperar más, Cinco se teletransporto donde estaba la chica, pero ella abrió un portal y antes de que llegara lo cruzo y estaba a dos metros de él.

—Que mierda —murmuro Cinco y giró a verla.

—Aprende a ser rápido, anciano —le dijo divertida.

Ambos empezaron a pelear cuerpo a cuerpo. Cinco ahora entendía porque tenían en un pedestal de buena asesina a la chica, sabía pelear y no como un robot de La Comisión, tenía movimientos que le era vagamente conocidos.

La chica le dio un pata en el estomago, dejándolo sin aire, pero antes de que ella volviera a atacar, se teletransporto a dos metros de ella, que suspiro frustrada. Tenía que admitir que Cinco sabía dar buena batalla y más con sus poderes, cosa que ella no podía ser, porque por ordenes de Le Encargada le prohibió usarlos contra él.

Al recuperar su respiración, Cinco volvió a atacar, pero ella esquivo el golpe, solo pudo descubrirle el rostro.

—Veamos a quien matare hoy —dijo Cinco, ya que ella le daba la espalda.

—Veamos quien mata a quien —dijo ella dándose la vuelta y mirándolo.

—¿____________? —murmuro Cinco sorprendido al ver su rostro.

Aquello lo aprovecho la chica y le di otra patada, derribandolo al suelo. Ella le puso el pie en su garganta, haciendo que su respiración se acortara poco a poco.

—Creo que gane —le dijo divertida ella, aun si quitar su pie de la garganta de Cinco—. Lastima que La Encargada te quiere vivo.

Esme odioso —empezó a decir Cinco con dificulta y en griego antiguo—, como la puerta del, aquel que guarda en su corazón una cosa y dice otra.

Aquello a la chica la desconcertó. ¿Por qué le decía eso? No, ¿por qué ella recordaba eso?
Aflojo un poco su pie de la garganta de Cinco, mientras su cabeza le dolía un poco. Cinco aprovecho su descuido, la golpeo en las piernas ya derribo, haciendo que se golpeara la cabeza y se desmayara.

Cinco seguía en el suelo, recuperando el aire, mientras miraba a ______________. ¿Qué mierda fue todo eso? ¿Por qué lo ataco? ¿Por qué no lo reconocía antes? Dudo por un momento si ella era su ______________, Número Ocho. Se acerco a ella y tomo su brazo izquierdo, al alzar la manga de su blusa pudo ver el tatuaje que su padre hizo que se hicieran cuando estaban en la Academia. Definitivamente era ella.

La miró unos segundos más. ¿Por qué estaba viva y trabajando para La Comisión?
Se levanto del suelo y la miró, para luego cargarla como pudo y meterla a los asiento trasero del auto. Él subio al asiento del piloto y empezó a conducir lejos de ahí, antes de que llegaran los policías.

Donde las cosas empezaron || The Umbrella AcademyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora