🍃Epílogo🍃

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Corea
Año 2015


- ¿Pudieron ser felices?- preguntó la vocecita cantarina y suave.

- Lo fueron... aunque no tardó mucho para que los descubrieran y los separaran- dijo el chico teñido de celeste, la pequeña personita estaba sentada en su regazo, le estaba contando una historia triste- Pero ellos fueron felices y buscaron un cambio, y por eso son recordados...

- Pero eso no nos lo enseñan- el pequeño pelinegro que estaba a su lado se quejó- La maestra de historia no dice nada de ellos... solo nos habla del rey que se llama igual a tío Nam...

- Quizás no se los dice porque son niños, y hay cosas muy dificiles de entender...- explicó el adulto, escuchando una risa a sus espaldas.

- Su padre tiene razón- la cabellera rubia se acercó, sentandose al lado del pequeño pelinegro, quien con emoción recibió su jugo de cajita.- La historia relata muchas cosas, pero conforme vayan creciendo descubriran lo demás...

- Pero es triste... papi...- la pequeña dijo- Si al final se separaron y no volvieron a verse, ¿por qué sufrieron tanto?

- El amor es un enigma, tiene retos...- el de cabellos celestes dijo besando la frente de la pequeña sentado en su regazo- ¿Recuerdas el verano pasado, donde fuimos al bosque y te caíste?- la pequeña asintió, recordando su bracito lastimado- Pero no dejaste de cantar toda la mañana y al llegar a clases de nuevo, le contaste a tus amigos lo divertido que había sido apesar de haberte caído...

- Es que papi usó la corona de flores que le hice- dijo con una sonrisa a la cual le faltaba un pequeño diente. El rubio sonrió y le dio una galleta.

- Por eso, ellos se mantuvieron juntos, sabían que quizás no podrían vivir mucho tiempo, y que todos los separarían...- siguió diciendo el mayor- Pero fueron felices... aunque tú te caíste, disfrutaste el viaje al bosque, a ellos les pasó igual, aunque después los separaron, disfrutaron cada momento juntos...- prosiguió- Aprovecharon cada instante pues no sabían cuando sería el último...

Los dos niños asintieron y sonrieron. Les gustaba esa historia que sus padres les contaban cada vez.

El rubio dirigió su mirda al jardín que se encontraba fuera de su hogar, durante la primavera los colores de sus flores eran hermosos...

Ambos adultos se levantaron y les pusieron una película, faltaban unos minutos para que sus amigos llegaran a "invadir" su casa y aún quedaban bocadillos por hacer.

- Te saltastes muchas partes...- le dijo el rubio una vez ambos se pusieron a cocinar.

- No podía relatar todo lo que ese jardinero le hizo a su ayudante- mencionó con una ceja alzada.

- Me da tristeza saber lo mucho que sufrieron...- habló el rubio de nuevo cortando algunos tomates para los sandwiches.- Mataron a los Kim y fue lamentable para el jardinero real, y creer que ellos esperaban tener hijos juntos...

- Lo sé, pero aún es una historia muy valiente- dijo el de cabellos celestes- Enfrentarse a todos esos retos y dificultades, alejarse para poder dar un poco de paz al rey, me imagino que en las crónicas no hay nada de eso...

- Yeoung tiene razón, no van a mostrar que un rey tuvo una pareja hombre- el rubio sonrió con nostalgia y un poco de melancolía- Quizás cuando esten mas grandes podamos contarles el resto...

- Claro... tenemos mucho tiempo para ello, solo tienen nueve y siete años- dijo el mayor de ellos. Armando los sandwiches en una bandeja, listos para servirlos.

El rubio sonrió y asintió con calma.

A los minutos sonó el timbre y los dos chicos supieron quienes eran, desde antes de llegar a abrir la puerta, las voces se escuchaban un poco alto.

En los Jardines de Su MajestadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora