El camino al lago negro fue bastante agradable para ambos chicos. Al contrario de lo que pensaba Alicebri pudo establecer una conversación fácilmente con aquel chico sin ponerse nerviosa.
– recuerdo que pasamos todo un verano jugando que éramos los personajes del libro.- Alicebri le estaba hablando sobre su amistad con Fred y George.
- imagino lo tiernos que se veían.- dijo el mayor sonriendo.- debió ser un libro bastante interesante, ¿Dónde lo puedo conseguir?
– la verdad no sé muy bien, fue un regalo de parte de mamá cuando cumplí 6 años —dijo con notable melancolía al recibir un pequeño flashback de un acontecimiento de su niñes, pero rápidamente formó una sonrisa con sus labios— si quieres puedo prestarte el mío.
– ¿harías eso por mí? — pregunto sorprendido el chico y la chica asintió.
– algo me dice que puedo confiar en ti.
–muchas gracias, señorita. Esto es un gesto muy importante para mí — le miró con una sonrisa y la cara de la chica se puso roja.
– de..de nada
–¿puedo hacerte una pregunta?
– claro, con que no digas algo de mi padre asociado a palabras como asesino o traidor todo bien, aunque no creo que lo hagas.
–claro que no, yo no creo que él sea un asesino y menos un traidor. —dijo firmemente.— Siento que generar una afirmación sobre alguien que no conoces es lo mismo que juzgar un plató de comida sin si quiera probarlo.
– sabias palabras mi querido Hufflepuff.— halago la Black mientras subía a una piedra y comenzaba a saltar hacia la siguiente, siendo así sucesivamente debido a que al parecer era un camino de estas.— ¿En serio crees que mi padre no es el culpable ? —pregunto la chica curiosa casi cayendo en uno de sus saltos.
Cedric caminaba tras ella procurando cuidadosamente que no cayera.
– si, mi madre conoció a tus padre y puede afirmar que Sirius sería incapaz de hacer tan catastrófico acto a alguien que amaba como si fuera su propio hermano.
Alicebri escuchó atentamente las palabras del mayor y sintió un calor en su pecho junto a las mariposas que últimamente revoloteaban sin control cada vez que si quiera pensaba en Diggory.
– gracias por no ser como los demás Cédric.— paró repentinamente su "caminar" y miró al castaño con una sincera sonrisa.— ¿sabes? Me suele escribir cartas — esta vez su sonrisa tuvo una pizca de tristeza que no fue inadvertida por el Hufflepuff. — él está bien o eso me gusta creer, pero me preocupa saber qué tal vez está congelado de frío en aquellas tétricas celdas.— susurro esto último y Cédric no lo pensó dos veces y la abrazo.
Sabía lo que se sentía perder a alguien amado, lo había vivido hace unos años y no era el sentimiento más gustoso.
Por otra parte, era algo divertido el hecho de que a pesar de que Alicebri estuviera sobre una roca, seguía siendo más pequeña que Cedric, llegando tan solo a su frente.
Pasados un par de minutos el distancio unos centímetros el abrazo y tomo con ambas manos la cara de la chica dejando pequeñas caricias en esta.
– el estará bien, te lo prometo — dicho esto beso la frente de la Gryffindor y luego ambos se miraron fijamente a los ojos, siendo imposible no notar la hermosa conexión que formaron.
Inconscientemente fueron acercándose poco a poco hasta quedar a unos milímetros de distancia, ambos sintiendo la respiración del otro chocar contra su piel, tan solo faltaba un pequeño movimiento para que sus labios se juntaran.
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Alicebri Black: serendipity.
Fanfic»»-----primer tomo-----«« Todos conocemos la historia del famoso niño que vivió, pero... ¿Alguna vez has oído sobre la chica proveniente de otra realidad que salvo al elegido? Porque el que busca, tarde o temprano encuentra, pero a veces las situaci...