3 1997, pajarito y bermuda roja

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Un simple "¿Estas bien?" Soluciona las cosas para muchas personas o pero eso no soluciona nada con Chan.

Es mas complicado que una mujer en sus dias.

Lo observé durante un par de minutos, curiosa. Llevaba una semana trabajando en su casa, limpiando y lavando su ropa y nunca interactúabamos. Era raro ya que justo ahora estabamos sentados viendo la TV y ninguno decia nada solo para reirse del anime y eso era aun más raro, ya que no tenia ni idea de que a Chan le gustara ver anime, menos Naruto, digo, sus amigos buscaron una persona para que lo distrajera de su trabajo, pero el parecia muy familiarizado con el anime.

--- Me sorprende ver que sabes cosas sobre Naruto --- dije mirandolo de reojo, simplemente lo habia mencionado para crear una conversacion, porque dios me libre de situaciones incomodas. Yo me sentia incómoda y si él no, entonces tiene que soportar mi intento de conversacion.

Me miro de reojo con una sonrisa por lo que acabamos de ver.

--- Cuando el anime se estreno yo lo miraba --- mi rostro se contrae en confucion y sin poder evitar mi pregunta la suelto:

--- Pero Naruto salió en el dos mil dos --- me gire curiosa por su aclaración.

--- Si, lo se --- pestañeo aun mas confusa. Tomo el control y le pongo pausa al episodio.

--- ¿A los dos años veías Naruto? --- pregunto con ironía. El me mira con una sonrisa sin dientes.

--- ¿Cuantos años crees que tengo? --- me pregunta sin apartar la mirada.

--- Si naciste en el dos mil debes tener veinte, ¿no? --- pregunto con duda. Su sonrisa se ensancha y niega.

--- ¿Quien te dijo que nací en el dos mil?

Me encojo de hombros apartando mi mirada a mis uñas mal pintadas de un color verde oscuro.

--- Yo lo supuse...--- susurro jugando con mis dedos --- por tu rostro --- levanto mi mirada encontrandome con la suya que nunca perdio aquel brillo y sonrisa burlona.

--- Bueno, supones mal, nací en el noventa y siete, tengo veintidos años --- pestañeo incredula mirando como se levanta del sofa y se encamina hasta la cocina.

--- O sea que tú... --- me levanto y lo sigo hasta la mesada me siento en uno de los asientos de madera y miro su espalda --- ¿eres cuatro años mas grande que yo? --- lo veo afirmar, se da la vuelva con un baso de agua y mientras lo toma niega con su dedo, cuando termina de tomar habla:

--- Depende, podría ser cuatro años y meses, ¿cuando cumples? --- lo pienso un poco antes de responder.

--- El cuatro de octubre --- respondí mirandolo de reojo.

--- Bueno, en ese caso te llevo cuatro años y... espera, ¿cuando cumples? --- formo una linea con mis labio y rodo los ojos.

--- No lo volveré a repetir --- me mira con los ojos abiertos a lo que yo ruedo nuevamente los ojos.

--- Dijiste ¿cuatro de octubre? --- suspiro mirando mis uñas.

--- Si... --- susurro mirandolo nuevamente. Su expresión era de sorpresa total, como si hubiera escuchado la declaración de un amor.

Inclino mi cabeza a un lado mirando como el hace calculos con sus dedos. De un momento a otro su confucion es más que notoria y sin resistir suelto una carcajada, me miro con el entrecejo hundido.

--- ¿Qué? --- pregunta con sus dedos extendidos. Niego dejando de reir, aclaro mi garganta y señalo su anatomía con mi dedo indice.

--- Te ves gracioso cuando usas tus dedos para calcular algo --- su fastidió se hace notar y me mira directo a los ojos.

New sensations | B.C skzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora