"Que primitivos, llevandole una mujer a su líder"
#Heterosexual
#intento de historia corta
#no permito copias ni adaptaciones sin mi permiso o consulta
#probablemente tenga smut, aun lo estoy considerando
#se permite opiniones constructivas y poc...
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Hoy es mi cumpleaños.
Por consecuente ya fue el cumpleaños de Chan.
Y no celebramos nada.
¿Estoy triste? Por supuesto, pero no se lo voy a decir porque también el esta mal. ¿Como lo se? Porque a puras penas se acordó de que hoy es mi cumpleaños y me sonríe con los labios pegados y la mirada decaída. Sus ánimos están por el piso y por obvias razones.
No puedo pedirle que deje de sufrir simplemente porque yo también lo hago.
Me dije a mi misma que tratara de ignorar esa maraña de sentimientos que quieren erradicar con mi escasa alegría cumpleañera, y ponga todas mis energías en sonreír e inspirar felicidad. Así que desde las 6 y 30 de la mañana vengo acomodando el desastre del departamento y planeando el desayuno y el almuerzo.
Mi agenda estaba apretada, pero siempre con un espacio para el. 06:30 : Acomodar el desastre. 07:30 : hacer el desayuno americano que tanto le gusta (planeaba un desayuno solo entre nosotros) 09:00 : levantar a los chicos (porque aunque Chan no allá estado de ánimos para celebrar, sus camaradas, si lo estaban y se quedaron hasta las 04:40 tomando y jugando videojuegos en la sala). 10:30 : correr al instituto porque tengo clases extracurriculares. 11:00 : llegarme al hospital para ver a mi mamá y llegar a casa para ver a papá. 12:30 : llegarme hasta la mansión de tía Gon (que por cierto sigue igual de decaída) 13:00 : volver al departamento y preparar el almuerzo (tarde como siempre) y comer con todos los chicos.
A la noche, en la cena, tenía planeado ir solo los dos a cenar en alguna parte.
Todo fríamente calculado.
Preparo los huevos, el jugo, traje donas, también pancakes con frutos y miel, un poco de carne y arroz, a Chan le fascina el arroz con carne picada, sopa de hueso y gimbap. No faltaba nada.
Solo él.
Camino apresurada a su cuarto, aún estaba ahí. Abro un poco la puerta y meto mi cabeza. Estaba acostado, boca abajo mirando a un costado. Me costaba un poco tratar con el en estas condiciones, pero siempre con una sonrisa y una buena actitud, lo podía manejar.
Entro por completo, miro a mi alrededor (algunas veces Felix entra a su cuarto sin permiso a sacarle medias) Sin moros a la costa, me subo a la cama y con toda las intenciones de despertarlo le levanto un ojo, funciona a la perfección. Comienza a pestañear y a gruñir palabras que no entendía. Se gira hacia mi pasando una de sus manos por su cuello, observo su dedo y el anillo que lleva puesto, también las pulseras, eran las que le regalé, estaba usando todo desde ayer.
--- ¿Que hora es? --- es lo primero que dice. Sonrio con delicadeza y le extiendo mi muñeca. La toma y se fija la hora en mi reloj. --- ¿Hace cuánto que estás despierta? --- se sienta mirándome adormilado. Sin borrar mi sonrisa levanto mis hombros restando importancia.