Narra Joaquín.
Tres meses después.
—No puedo creer que estén empacando de nuevo —Isa estaba recostada boca abajo en la cama que compartíamos con Paula todas las noches mientras nosotros dos terminábamos de empacar las valijas—. Ni siquiera pudimos disfrutar de que Paula tuviese su título.
—Si que lo disfrutaste —En ese momento, mi novia apareció por la puerta del baño cargando un pequeño bolso con las cosas de aseo—, me llenaste de cualquier sustancia que pudiera existir luego de que salí de rendir mi final. Gritaste mi nombre en la entrega de diplomas cual cancha de fútbol y gracias que no hicieron brindis porque seguramente harías algo para disfrutar de la entrega de mi título.
—A veces creo que eres una exagerada —Isa puso los ojos en blanco, haciéndome reír—. Sólo hice lo que se supone que se debe hacer, nada más ni nada menos.
—Hagamos de cuenta que te creo —Paula suspiró antes de guardar las últimas cosas en su maleta—. Estoy planeando como vengarme el día de tu graduación, lo sabes desde ahora.
—No eres tan mala como para planear una venganza por taaaanto tiempo —Isa sonrió antes de acercarse a su hermana para ayudarla a cerrar la valija—. Eres la mejor hermana del mundo que me consciente en todo lo que puede.
—Eres exasperante —Dijo Paula, aún con una sonrisa en los labios—. Pero te quiero, enana maldita.
—Oh, habló la señora yo-mido-dos-metros —Paula la fulminó con la mirada mientras Isa estallaba a carcajadas—. Recuerda que me amas, sabes que me amas.
No puede evitar reír cuando Paula se tiró sobre Isa para hacerle cosquillas. Ella definitivamente tenían un complejo de edad cuando se juntaban. Disfrutaba de ver a mi novia interactuar tan libremente con su hermana, habían tenido una infancia bastante distanciada la una de la otra y era muy lindo verlas jugar juntas.
Ambas se parecían y, al mismo tiempo, eran muy distintas. Compartían el mismo color de cabello y un pequeño matiz gris en los ojos, solo que Isa tenía gran parte de sus ojos verdes el gris que ocupaba en los de Paula seguía presente. Ambas eran tercas y completas defensores de lo que creían. Pero, donde Paula era toda decidida y bastante callada con respecto a sus asuntos, Isa tenía que preguntar todo el tiempo acerca de sus cosas hasta conseguir comprender lo que está haciendo era lo que realmente quería.
Eran un par de hermanas bastantes opuestas, pero a la hora de estar para la otra eran simplemente de fierro. El solo hecho de que Isa quisiera asesinarme meses atrás cuando existió un mal entendido entre Paula y yo dejaba ver de lo que eran capaces la una por la otra. Esa relación que habían forjado luego de sus diferencias las hacía únicas e imposible de separar.
Por eso les costaba tanto las despedidas entre ambas.
Paula llevaba varios días diciendo que no había pasado tanto tiempo con Isa como hubiese querido y se repetía una y otra vez que tenía que ver con que estaba terminando su carrera mientras que su hermana estudiaba por la suya. Mi novia había estado bastante triste de solo pensar que nos pasaríamos seis meses lejos de la familia, pese a que ella volvería bastante por el negocio que compartía con Quino y Macky.
—Nada como una pelea de despedida —Julián entró a la habitación y se apoyó en el marco de la puerta—. ¿Hace mucho tiempo están riendo como histéricas en el piso?
—Sólo un par de minutos —Dije con una amplia sonrisa—. Pero esa es su forma de despedirse, déjalas tranquilas.
—Y yo que iba a unirme —Esas palabras hicieron que ambas hermanas dejaran de reír y se miraran la una a la otra de forma cómplice—. Oh, no... No lo harán...
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Una vida contigo. [EDMMA #3]
RomanceDecisiones que tomar. Alegrías que compartir. Peleas que enfrentar. Reconciliaciones que atravesar. Tristezas que superar. La vida transcurre y solo queda vivirla. Si te enamoraste de esta gran historia de amor, no podes perderte este vistazo a la v...