cybersex ♡ hyunin (vieja versión)

[♡] 30.

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Al llegar de nuevo al parque, Jeongin se sienta en el árbol de ayer y piensa las cosas, se quiebra la cabeza pensando en una sola cosa.

—Hyunjin.

—¿Y que sucede con él?

—Estoy embarazado, el hijo que llevo es de él —suspira tristemente. —Él... me dijo que era incapaz de embarazar a alguien.

—¿Estéril?

Jeongin asiente.

—Una chica... su ex, y quien antes antes fue mi amiga, está embarazada también, y probablemente sea de él —sonríe con pesar. —¿Y sabes que es lo peor?

Él maestro, obviamente, niega.

—Ella me dijo que todo es por una herencia, que él me embarazó simplemente por maldito dinero, ¿sabes que tan mierda me sentí por dentro cuando lo supe?

—Jeongin, ¿has hablado con él? Quiero decir, pueden ser dos cosas, primeri, él no lo hizo por esa razón, y segundo, lo hizo pero por algo tan importante que no pudo no hacerlo.

—¿Qué tan importante para usarme de esta manera? ¿Que tan malditamente importante para tomar mi futuro como si fuese una jodida broma? —su sangre, sin querer, había comenzado a hervir de la rabia, y con ello, sus ojos se habían cristalizado. —Yo siempre quiero creer en solo lo bueno de las personas, aunque eso me hiera en el proceso, no quiero creer que Hyunjin me hizo esto, no quiero, porqué me duele como la mierda —limpia su nariz con el dorso de su mano. —Lo amo, en serio lo amo, pero si hizo esto... No creo poder perdonárselo, y eso es triste porque siempre imagine que estaría siempre a su lado.

—La vida actúa como debe actuar, Jeongin, lamentablemente a tu favor o en tu contra, siempre serán cosas que te ayudarán, no puedes verlo por que estás cegado por el dolor y enojo, pero llegará el momento en el que comprendas que todo sucede por algo, cuando seas feliz, dirás que todo lo que pasaste valió completamente la pena —con una sonrisa, se levanta de su lugar. —Hay muchas cosas que debes todavía entender, que no puedes hacerlo, y muchas otras que estás por descubrir, eres joven, Jeongin, disfruta tu vida, es muy corta como sus placeres, las penas son solo una distracción tonta para nosotros.

—Gracias, supongo —levanta su vista para verlo irse, sin preguntarle como de casualidad había estado nuevamente en el mismo lugar que él y a la misma hora.

Estaba bastante ocupado reteniendo su llanto. Quería llorar, quería derramar más lágrimas, su corazón no se había desahogado todavía, debía deberse a su embarazo, ¿pero no era un poco rápido para que sus sentimientos estuviesen hechos una mierda?

Con una repentina sensación de dolor en su vientre bajo se levanta de su asiento y se marcha a casa a descansar.

Jeongin tenía ciertos dolores.