Mi endemoniada vida

Capítulo 41: ¿Lucifer?

El día tan menos esperado había llegado, viernes 13 de noviembre, el día en el que Lucifer, el amo del infierno, vendría a visitarnos. No pude estar tranquila en todo el día por la ansiedad que me causaba el pensar en qué clase de demonio tendría frente a mí.

— Kary, cariño — me dijo Roger por teléfono — Tranquilízate, esto no les hace bien ni a ti ni al bebé.

— Ay, lo sé. Es solo que, me pone muy nerviosa pensar en qué clase de "cosa" aparecerá. Bueno, será mejor que te deje trabajar. Nos vemos.

— Te preocupas por nada — dijo Niko con toda tranquilidad — Lucifer es un buen tipo una vez que lo conoces. De hecho, es como ese que vez en la televisión.

— ¿Vas a comparar al Rey del inframundo con un actor de televisión? — le pregunté.

— Sí, comparar... — su teléfono comenzó a sonar — El deber llama — desapareció sin darme tiempo de decir nada.

— ¿Te das cuenta de lo responsable que se ha puesto ese perro? — dijo anthony mientras se estiraba en su cama — De seguro quiere impresionar al Amo demostrándole que es "útil" — se levantó y se transformó en humano para ir a buscar una lata de atún.

— ¿Tanto le importa esta visita?

— Tanto como te importa a ti.

— ¿A ti no?

— No soy un novato. El Amo sabe quién soy y ha visitado a mis antiguos dueños.

— ¡Hola, Kary!

— ¡Ay, Dios! — grité, ganándome una mirada de disgusto por ambos — ¡Evee! ¡¿No puedes hacer una entrada menos..."provoca infartos"?!

— Lo siento — dijo riendo — solo quería jugar con el pequeño — abrazó mi abdomen con suavidad — ¿quién es mi pequeño? ¿quién es mi pequeño? sí...tú lo eres...

Aquella escena me provocó una sensación de ternura y extrañeza, acompañadas de un escalofrío.

— Awww... aun no nace y ya lo quiero...

— Evee... Solo tiene 2 mese, ya suéltame, por favor — obedeció entre risas se apoyó en Anthony.

— Aléjate de mí. — dijo Anthony.

— ¿Dónde está Niko? Necesito que me ayude con algo antes de que el Amo llegue... — dijo jugando con la punta de sus dedos — Pero veo que no está ¿Me ayudas, gato?

— Paso, no porque llevemos tiempo de conocernos significa que confiaré en ti. Quiero seguir "vivo" unos siglos más, gracias. — se fue comiendo el atún.

— Karyyyyyyy... 

— Wau, solo por eso me queda claro que sí eres hermana de Niko. — me miró con una expresion de perro suplicando — No es necesario hacer eso ¿Sabes?

—  Entonces ¿me ayudarás?

— No. No voy arriesgarme a algo posiblemente peligroso en este estado ¿Qué es eso tan importante que no puedes hacer sola?

— Quería hacer un regalo al Amo.

— Entiendo... No creo que sea necesario. Realmente no quiero saber que clase de "regalo" quieres darle; pero no creo que le importe.

— Supongo...

— Oye y... por qué no me ayudas a ordenar un poco. Así podemos... — alguien tocó a la puerta — que raro, Roger no llega hasta dentro de media hora y...

— ¡Señorita Kary...! — escuchamos la voz de Mox del otro lado de la puerta. Era raro. Se escuchaba extrañamente nervioso

— ¿Se puede saber por qué...?