Siempre estás tú

CAPITULO 36 "Mantente alejado de mi novia"

CAPITULO 36

SANTIAGO

Salí del baño con una toalla alrededor de mi cintura, me puse una camiseta negra, jeans y mis converse. Había olvidado que hoy había quedado para ir al cine con mis amigos.  Mire mi reloj, eran las cinco de la tarde y tenía que estar en el cine en veinte minutos.

Tome mis llaves, dinero y mi teléfono. Miré la pantalla y algo se revolvió en mi interior. Cada que miraba su foto la tristeza me invadía, tal vez lo mejor era que me olvidara de ella.

Mi cabello aún estaba húmedo cuando salí de mi casa. Conduje en mi motocicleta hasta un centro comercial a unos treinta minutos de donde vivía y me encontré con mis amigos afuera del cine.

La película empezó a las cinco treinta, era una película de terror que me distrajo de mis problemas durante un par de horas.  

Cuando salimos del cine decidimos ir a cenar algo. En el mismo centro comercial había una pizzería donde siempre comíamos. Últimamente había estado saliendo mucho con ellos después de un largo tiempo de abandonarlos por mi novia.

Le di un mordisco a mi rebanada de pizza, ajeno totalmente al tema de conversación de mis amigos. Tenía mil cosas en la cabeza, Vanessa mudándose lejos, ella besando a Israel, Israel rompiéndole el corazón, ambos en la misma habitación... El recuerdo de mi conversación con él regresó a mi mente y tuve la misma reacción. Algo en mi dolía con ese recuerdo.

Flashback

Después de dar vueltas por mi habitación totalmente inquieto, decidí que tenía que hablar con ella. Israel no me dejaría verla si iba y tocaba su puerta así que tendría que salir por la ventana. Dudé un poco por el clima, era un día lluvioso y quedaría empapado.

Me puse una sudadera y salí por la ventana de mi habitación, cuando llegue al balcón de Vanessa estaba totalmente mojado como supuse.

Solo una cortina estaba abierta, me asomé y me sentí un intruso. Vanessa estaba durmiendo mientras Israel estaba sentado a su lado observándola. Su mirada se posó en mí y se levantó de la cama, caminó hacia la ventana, abrió y salió al balcón sin dejarme entrar.

-¿Qué haces aquí? –Me miró molesto.

-Eso no te importa, quiero hablar con ella.

-No hablarás con ella, Vanessa no quiere verte.

-Quiero que me lo diga ella.

-Te lo estoy diciendo yo, no te acerques a ella. –El enojo que sentía hacia él aumentaba cada vez más con cada palabra que salía de su boca.

-Tú no eres nadie para decirme si debo acercarme a ella o no.

-Soy su novio. –Una sonrisa burlona apareció en su rostro y me dieron ganas de borrársela con mi puño.

-¿Crees que voy a creer eso?

-Ese no es mi problema, mantente alejado de mi novia. –La ventana se cerró antes de que pudiera decir algo más. ¿Y si en verdad eran novios? ¿Tan rápido me había olvidado?

Las gotas de lluvia escurrían por mi cara, o tal vez eran lágrimas.

Ella me había estado ignorando desde que vio la foto falsa de Carolina, no era una idea tan descabellada que estuviera con él ahora. Además, los había visto besarse.

Regresé a mi habitación con el corazón hecho pedazos. Decidí que no insistiría más, si ella ya estaba con él, yo no tenía nada que hacer ahí.