𝑺𝒑𝒆𝒄𝒊𝒂𝒍 𝑩𝒍𝒐𝒐𝒅 (𝑱𝒂𝒄𝒆 𝑯𝒆𝒓𝒐𝒏𝒅𝒂𝒍𝒆)

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Despierto algo confundida, pequeños recuerdos de lo que pasó hace unas horas vienen a mi mente. La imagen de Izzy herida y de Clary devastada son más que suficientes para preocuparme. Al echar un vistazo a mi alrededor me percato de que estoy en la enfermería, tengo un gran vendaje en la pierna y de vez en cuando un dolor punzante me obliga a hacer una mueca. Mi vista se posa en Isabelle que descansa en la cama de al lado, a pesar de estar anímicamente mal, tiene buen aspecto. Sin perder mucho el tiempo decido vestirme y salir de la enfermería en busca de respuestas. Solo me hace falta hablar con varios shadowhunters para saber que mientras Jace y yo estábamos encerrados, un demonio atacó el instituto.

-¿Hay muchas bajas?- pregunto a la shadowhunter con miedo a su respuesta.

-Demasiadas, el que peor lo lleva es Alec- responde ella haciendo una mueca -Después de lo que pasó con la madre de Clary...-

-Jocelyn- susurro mientras siento como mi corazón se acelera.

Con razón Clary estaba tan mal ayer, si su madre ha muerto no me puedo imaginar por lo que está pasando. Tras darle las gracias a la shadowhunter voy en busca de mi amiga, pero no hay ni rastro de ella, así que decido buscar al mayor de los Ligthwood. Me recorro prácticamente todo el instituto hasta que solo queda un lugar por inspeccionar; la azotea. El aire golpea mi cara en cuanto salgo por la puerta, unos destellos en el cielo y el ruido que hace el arco al ser cargado me hacen buscar al dueño. Alec se encuentra allí disparando flechas hacia todos lados, su semblante está serio y no se da cuenta de que lo estoy observando hasta que avanzo hacia él.

-Quieta- me advierte apuntándome con el arco.

-¿Me vas a disparar?- pregunto irónica mientras me cruzo de brazos.

-Claro que no, pero no te acerques- se limita a decir bajando el arma.

-Mira Alec, tienes que soltar todo lo que estás guardando, nada de lo que ha pasado es tu culpa- comienzo a decir mientras lo miro fijamente.

-Maté a la madre de Clary, también era la de Jace ¿Recuerdas?- comenta él sin ni siquiera atreverse a mirarme.

-Fue el demonio, te obligó a hacerlo- explico intentando que entre en razón -Nadie te culpa de su muerte, deberías saberlo-

-Por el Ángel Tara, todos lo piensan- exclama exasperado mirándome a los ojos -Tú no lo entiendes..-

-Claro que lo entiendo, Alec por favor déjanos ayudarte- le ruego intentando acercarme.

-Aparta- dice medio molesto mientras me vuelve a apuntar con el arco.

-¡Está bien! haz lo que quieras- exclamo de mala gana retrocediendo -Pero recuerda que no estás solo, somos un equipo-

Tras decir esto lo dejo solo en la azotea mientras vuelvo dentro, no me apetece nada ahora mismo discutir con él. Una vez de vuelta en la sala de operaciones Aldeltry aparece convocando una reunión que dice que es importante. Todos los shadowhunters del instituto se reunen y forman filas justo enfrente de él. Me mantengo lo bastante lejos apoyada en una columna mientras veo como todos se giran a observarme, algo que me incomoda y me cabrea al mismo tiempo.

-Primita- escucho que dicen detrás de mí.

-IZZY- pego un gritito llamando la atención de todos -¿Qué miráis?-

Esto último lo digo con el semblante serio mientras dejo que mis ojos de licántropo se manifiesten, automáticamente todos se giran algo asustados.

-Vaya hoy no estás de humor- comenta Izzy riéndose.

-No me gusta que me miren tanto, no dejan de hacerlo- bufo rodando los ojos.

Jace aparece a nuestro lado y nos mira por unos segundos. Izzy y él se ponen a comentar sobre el estado de salud de la mediana de los Ligthwood, ella dice estar bien, pero yo la noto débil aún.