ese Virgen es mio

CAPITULO 40

Pov Donghae

-Lee Donghae- anuncio el director.

Mis padres me dedicaron una sonrisa y con nervios me acerque a qué me dieran mí diploma.

Los profesores me tendieron la mano y yo me puse al lado de Sungmin y yo espere con nerviosismo un nombre.

-Lee Hyukjae- lo vi subir mientras me miraba. Me sentía roto en mil pedazos, está última semana había sido complicado, había intentado por todos los medios volver hablar con el de manera desesperada, me negaba a aceptar que me hizo lo que tanto miedo tenía que ocurriera.

Poco a poco la realidad cobraba más sentido y me llevaba a ser realista.

Desde entonces era como si me hubiera desgarrado por dentro. Estoy enamorado hasta más no poder de alguien que hace que me queme cada vez que me acerco un poco.

Soy un tono por creerme todo, un ingenuo. Lo que daría por retroceder el tiempo y haber acabado con esto.

Este año me e sentido como un muñeco de trapo que se pasaron de mano en mano, sin que a nadie le inportarse mis sentimientos.

En casa todos los días había una rutina voy a mí habitación me encierro, lloro y le doy mil vueltas a todo lo que ocurrió mientras me repito a mí mismo lo idiota que fui.

-¿Estás bien?- me preguntó Leeteuk a mí otro lado.

Negué con la cabeza -no lo puedo soportar Leeteuk y no consigo que se me pase-.

Se mordió el labio nervioso -Hae te tengo que decir una cosa importante que creo que debes saber...-.

Todos comenzaron a quitarse los birretes y a tirarlos al aire y Leeteuk calló.

Cuando acabamos, nos dejaron un tiempo libre y yo me sentí atraído a un lugar.

Entre al salón en el que había vivido tantas cosas, cuando me senté con Hyukjae, las insistencias de Kibum, las escusas de Siwon, las miradas de Leeteuk hacía Heechul... empecé a sollozar sigilosamente, lo iba a echar mucho de menos.

Insintivamente mire el puesto, muestro puesto. Ese sitio donde había discutido, había reído, me había enamorado....

Hubo un carraspeo.

-no, fuera, vete-.

-tenemos que hablar-.

-no tengo nada de que hablar contigo, vete-.

-por favor-.

Está vez me di la vuelta para mirarlo a los ojos -¡Déjame de una maldita vez!¡Deja de hacerme daño!¡Deja de acercarte a mí,darme falsas esperanzas y tirarme a los dos segundos!-.

Calló y las lágrimas eran tantas que todo comenzó a ser borroso.

-¿No te cansas de hacerme daño?¿De verme sufrir? Por favor hazlo por humanidad-.

-Hae- Leeteuk interrumpió en el salón de clases -de esto quiero hablarte-.

-¿Tu que tienes que ver con esto?-.

Tomo aire -se que me vas a odiar pero yo fui quien le dijo a Hyuk que fingiera que solo fuiste un acoston mas-.

Mí sistema colapso -Leeteuk por qué...tu no...no tiene sentido, solo estás intentando ayudar-.

-me acordé de tus palabras, cuando me exigiste que te defendiera y te protegerá. Pensé que el echo de que te vieras vuelta en una relación a distancia no te haría disfrutar de tus años de universidad así que le dije a Hyuk que para no hacerte daño era mejor que te dejará que solo había sido algo de una noche-.