Perra sin corazón.

1.6K 103 7
                                    

Estoy en el punto donde me importa un carajo hacer mierda a la gente donde puedo hacer y deshacer a quien yo quiera. Ilusionar a la gente y mandarlos a la mierda fácil y sencillo y sin tartamudeos.
Había cambiado mucho desde que decidí dejar de amar a Isabel ya que no me importaba decir más de lo normal lo que pensaba aunque sabía que no eran las palabras adecuadas lo hacía sin importar un carajo.
Isabel pues ahí estaba con una chica y su nueva relación. Lo más jodido es que aún estaba pendiente de ella aunque no tanto pero por una extraña razón lo hacía.
Estábamos a tan solo 4 semanas de salir de vacaciones de navidad y era un gran alivio ya que la escuela si cansaba desde físicamente y psicológicamente. Siempre he pensado que nadie podría saber y entender que estás generaciones son más dolorosas que felices en las etapas "más importantes de tu vida". Son un puto asco.
Me hago un chongo al entrar al salón y el ver que Isabel me voltea a ver después de mucho tiempo no me hace sentir nada solo sonrió para que vea como realmente estoy ahora sin ella. Estoy bien y me siento bien aunque hay un pequeño sentimiento hacia ella y supongo que eso fue lo único que quedó de esto, un pequeño sentimiento de aprecio por lo mierda que me hizo y bueno ahora sólo quiero terminar estas últimas semanas bien.
El maldito partido de fútbol era hoy y todos estaban emocionados tanto el equipo de hombres como las de mujeres y yo era la única fría en el tema ya que no quería tener ningún roce con Isabel, sabía que ya la podía evitar más pero aún así no sabía cómo iba reaccionar si volviera a dirigirme la palabra.
Entregó la tarea y me dan mis calificaciones de este mes que va concluir y no me fue tan mal a mi parecer un 7.2 es mejor que un 5.2 y que flojera hacer extraordinarios o ayudar a los profesores con otros alumnos.
Todas las clases se basan en entregar trabajos extras, atrasados o para subir calificación y yo solo hice dos extras para química e informática ya que por lo regular casi no entregaba nada.
El receso se me hace más largo de lo normal escuchando el tema del partido y contra qué grupo iremos. Decido alejarme de ahí y distraerme en otro lado que esto me pone más nerviosa cada vez.
Voy a ver a un amigo de otro salón llamado Angel y me platica sus problemas con su novia y prefiero mil veces soportar temas del amor a lo que en unas horas pasaría. Me la pase con el todo el receso y hubo buen tema de conversación aunque él hablo más que yo y por eso fue buena toda la conversación yo solo negaba o aceptaba cosas que preguntara.

Ángel - ¿será bueno hablar con ella? No la quiero perder así que lo haré

Alaska - Si
dije apretándome los labios

Angel - ¿tú buscarías a alguien por amor a pesar de todo lo que te hizo?

Mi mente se quedó en blanco y maldita sea en mi mente apareció la primera vez que vi a Isabel y la primera vez que le hablé después se me vino una película de todo lo que me había causado. Sin dar una respuesta me fui dejándolo solo y al reaccionar me di cuenta que ya no había nadie en el patio y todos estaban en sus salones y en que momento pasó si solo recordé por un maldito minuto y ahí me di cuenta de nuevo  del  daño que me hizo.
Pido permiso para pasar al salón diciendo que me había ocurrido un accidente con mi periodo y acepta la excusa el profesor dejándome pasar y al llegar a mi banca veo un papel con unas letras que decían "suerte hoy" con un corazón a lado. Que clase de cursilería es esto lo hice trozos y le fui a tirar al bote de basura y ya sabía quien había sido ya que me vio cuando hice trozos su recadito y lo fui a tirar donde va la mierda.
Empieza a darnos temas que veremos en las otras semanas que faltan para salir de clase y bueno esta clase me gustaba ya que el profesor era muy bueno con nosotros y nunca nos negaba algo pero sobre todo sabía dar su materia y pocos saben hacer eso.
Entregue un crucigrama que dejó y solo me regaló una sonrisa y un 10 marcado con un crayón en mi libreta.
Se fue del salón sin importar que faltaban 15 minutos para que acabara su clase. Fui al baño a lavarme la cara ya que me estaba ganando el sueño y no podía dejar que el sueño me venciera ya que tenía un maldito partido de fútbol.
Al limpiarme con papel escucho unos pasos y me dicen

Isabel - ¿porque tiraste el papel?
Con una voz tan dura y enojada que ya sabía de quien se trataba este juego

Alaska - ¿Tengo que darte explicaciones?
La miré y sonreí

Isabel - No, bueno si porque lo hice con cariño en verdad.
Da un paso hacia mi

Alaska - No tengo porque, así que deja de joderme y ve a joder a alguien más.
Torcí los ojos y me fui dejándola ahí sola como ella solía hacerme a mi.

Que raro es esto. Odiaba amarla y ahora solo odio sus excusas para hacerme caer pero no cederé, ya fui muy tonta con ella y realmente no pienso creer en sus mentiras. Aunque ojalá así hubiera sido siempre de linda.
Al entrar a mi salón después de 3 minutos llega mi papá y salgo a ver qué pasa y solo fue a hablar con mis profesores sobre mis calificaciones y qué tal me portaba y todos le dijeron lo mejor de mi y lo buena que soy en algunas materias.
Me da dinero y se va dándome un beso en la frente y mi mundo se viene abajo... ojalá supieras que necesito un "te amo hija" y no dinero. Vuelvo al salón con el alma en los pies. Aveces me duele que no se de cuenta de cuanta falta me hace y que ojalá lo viera más seguido. Fue el primer hombre al que amé y al que vi alejarse de lo que él construyó en la parte de su vida ya que ahora tenía una nueva vida con una chica y bueno al menos él es feliz.
Me doy cuenta que ya era hora del partido y yo sintiéndome así no iba estar tranquila y no me iba concentrar así que pedí que no quería entrar hasta sentirme mejor y saber que podía concentrarme en solo el partido. Me pongo mis audífonos y trato de desahogarme en lo que acaba el primer tiempo pero cuando menos sentí ya tenía que entrar. Que bien, espero no cargarla.
Entro al partido y solo aviento la pelota ya que era defensa de la portera la cual era Isabel, realmente no hice mucho más que protegerla y ahí dolió de nuevo el corazón y me di cuenta que aún en un partido trato de salvar que la hagan pedazos pero, ¿solo era eso no? Un maldito juego como yo lo fui para ella.
Ganamos por penales y al saber eso yo fui a cambiarme y beber agua, fui la primera en salir de la cancha. No tardó tanto el timbre cuando escucho a Isabel gritando mi nombre y la verdad es que no quería hablar con nadie y menos con ella así que solo la ignore y me fui a la puerta para por fin irme a mi casa y olvidarme de este sentimiento que tengo.
Ojalá los sentimientos se pudieran borrar, ojalá las personas se pudieran bloquear de tu vida, ojalá se pudiera olvidar en un día, ojalá se pudiera llorar por dentro, ojalá pudiéramos retornar una parte de nuestra vida...

Enamorada de mi amiga Donde viven las historias. Descúbrelo ahora