"Aunque no me vea junto a ti en el futuro, te amaré, porque ahora soy capaz de hacer todo por amor, pelearé contra mi destino para poder estar junto a ti."
¿Será posible cambiar la historia de mundo shinobi?
______, es una chica llena de alegría...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Que cansancio, desearía dormir y bañarme"
Ya ha amanecido y no he dormido ni un poco por cuidar a mis preciados amigos, y al fin la fiebre de Sasuke ha disminuido. El que haya podido cuidar de ellos es gracias a Kakashi, que me ha ayudado a aprender ninjutsu médico, así que puede sanar algunas de las heridas de esos tres.
"Te debo mucho Bakashi"
Saqué un bento de comida del sello de un pergamino, y cuando empecé a comer, la Florecilla se removió en el futón, tal vez el olor a comida le ha abierto el apetito.
Vi como se levantó de golpe y lanzó un kunai a mi dirección, lo esquivé por milímetros sólo inclinando un poco mi cuerpo hacia la derecha.
—¡¿Quién eres?, ¿por qué estamos aquí?, ¿tienes alguna relación con Orochimaru?! —exclamó la Haruno.
—Calmate por favor, no se quien sea ese tal Orochimaru, los traje aquí porque los encontré a los tres inconscientes a mitad de la nada —me llevé una cucharada de arroz a la boca —, de nada, por cierto —Sakura miraba mi bento fijamente —¿tienes hambre?, tengo más comida en ese pergamino.
Miró hacia otro lado, ignorando mi pregunta, tal vez pensaba que la comida estaba envenenada.
—Eres la castaña que también vió el genjutsu antes de la primera prueba, ¿cuál es tu nombre?
Nombre, cosa que no pensé cuando hice mi plan y no se me ocurre ninguno, ¿por qué no nací con un coeficiente intelectual como el de Shikamaru?, seguro estas cosas nunca le pasan.
—No me gusta dar mi nombre, puedes seguir diciendome castaña —respondí con nerviosismo.
—Esta bien, como quieras y —volvió a ver mi comida —¿de verdad tienes comida en ese pergamino?
—Claro —deshice el sello de la comida y apareció otro bento —toma, come, debes recuperar fuerza.
—Gracias.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Hey, Sakura, hay unos ninjas vigilando —susurré, segura de que nadie más me escuchaba. Ella me vió sorprendida, pero rápidamente actuó como sin nada.
