𝘕𝘢𝘳𝘯𝘪𝘢 & 𝘏𝘢𝘳𝘳𝘺 𝘗𝘰𝘵𝘵𝘦𝘳 [CANCELADA]

Capítulo 6

Narra ______

Me desperté a la mañana siguiente y vi que Pansy aún estaba dormida así que me acerqué a su cama y empecé a sacudirla para que se despertara, a lo que ella no respondió y seguí con mi día. Me bañé y me puse el uniforme y me dirigí al gran comedor.

Después de un rato de caminar me conseguí con Edmund quien parecía no saber dónde estaba así que me acerqué.

— ¿Perdido? — le dije cuando llegué y comencé a caminar de espaldas.

— Un poco... si — respondió mirando el lugar.

— Tranquilo Edmund, nos pasa a todos — dije riendo.

— Llámame Ed — sonrió —, si quieres, claro.

— Muy bien... Ed — dije enfatizando su apodo —. Vamos

Llegamos al Gran Comedor y ya había bastante gente incluyendo a Draco y Blaise, y me acerqué sentandome enfrente y Ed a mi lado.

— Buenos días — dije sirviendo desayuno en mi plato.

— Buenos días — repitió Ed.

— Buenos días — dijeron al unísono.

— Bien, basta de "buenos días" ¿como amanecieron? — les dije intentando ser más amables que los años pasados.

— Con sueño — dijo Draco.

— Con hambre — dijo Blaise y reímos.

— Genial — gruño Draco mirando el horario —. Nos toca DCAO con Ojoloco Moody.

— ¿Que resultara ser esta vez? — dije.

— ¿Como así? — dijo Edmund.

— Cada año nos a tocado diferentes profesores de DCAO — dijo Blaise —. En primer año fue un loco con el Señor Oscuro en su nuca.

— En segundo un estupido narcisista que no sirvió para nada y resultó ser un fraude — le seguí

— Y el año pasado fue un hombre lobo — finalizó Draco.

— Bueno almenos el si nos enseño algo — dije ya que Lupin había sido mi profesor favorito hasta ahora.

Después de desayunar nos levantamos y dirigimos al salón de DCAO donde se encontraba Ojoloco, me senté con Ed ya que Draco se sentó con Goyle. Empezó a presentarse de una manera peculiar y utilizando sarcasmo, y empezó a hablar de las artes Oscuras.

— Bien, quien me puede decir cuántos maleficios imperdonables hay — empezó Ojoloco de mala gana.

— Tres señor — respondí rápidamente.

— ¿Por qué se llaman así? — empezó a escribir en la pizarra.

— Porque son imperdonables, si un mago los usará... — siguió Granger, con la que no trataba mucho.

— Se ganaría un boleto directo a Azkaban — dijo.

— ¿Que es eso? — me preguntó Ed.

— La prisión de máxima seguridad del mundo mágico — le aclaré.

Empezó a dar un discurso de que debíamos aprender a usarlas, saber a que nos enfrentamos y que necesitamos estar preparados, y de pronto regaño a Seamus Finnigan por su goma de mascar y todos volteamos.

— ¡Bien ¿cual realizamos primero? — todo entre gritos — ¡Weasley! ¡De pie! — y este obviamente obedeció — mencione un maleficio — susurró.

— Mi padre hablo sobre una, la maldición Imperio — dijo asustado.

— Ah sí, tu padre la conoce muy bien  — dijo Ojoloco —. Hace unos años le dio problemas al Ministerio, tal vez esto les muestre porqué.

Saco una pequeña araña de un frasco y la puso en su mano y sacó su varita.

— Engorgio — dijo y la araña se volvió más grande — Imperio — volvió a decir.

Comenzó a pasear a la araña por el salón y colocándolas en las cara de los alumnos. Ed y yo reímos al igual que Draco hasta que el profesor le acercó la araña y la puso en su rostro.

— ¡Ah Quítamela! ¡Quítamela! — le decía a Goyle y yo reía.

Después de un rato en la cara de Draco me la pasó a mi y solo pegué un pequeño salto, si me daban un poco de miedo pero prefería no reaccionar. La devolvió a su mano, nos miró y habló de como magos y brujas afirmaban seguir al Señor Oscuro por esta maldición.

— Bien ¿quién más? ¿Otra más? — decía y Longbotton levantó la mano —. Vamos de pie

— Está el maleficio Crucio — respondió Neville

— Correcto ven, ven — le decía mientras hacía señas con su mano —. Es muy doloroso ¡Crucio! — dijo y la araña empezó a sollozar de dolor, yo me tapé los oídos.

— ¡Basta! — gritó Granger — ¡No ve que lo hace sufrir!

Ojoloco apartó su varita de el animal y este dejó de chillar, lo levantó y lo puso en la mesa de Granger.

— Tal vez pueda decirnos cuál es el último maleficio imperdonable — le dijo y esta negó — no, okey, ¡Grant! — gritó mi apellido y yo me asusté — diganos el último maleficio — me quedé callada pero lo dije.

— Avada... Avada Kedavra, señor — dije y me dieron escalofríos.

— Muy bien — dijo — ¡Avada Kedavra! — repitió y la araña murió — El maleficio asesino, solo una persona lo ha sobrevivido y está en este salón — dijo acercandose a Potter.

Cuando terminó la clase estaba aliviada pero asustada y un poco traumatizada, sin bromas.

— Está un poco loco el profesor — me dijo Ed sacándome de mis pensamientos.

— ¿Un poco? Un poco mucho — le respondí —. Vamos apurémonos para la siguiente clase — dije intentando olvidar todo lo anterior.

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Si, le cambié el apellido, pero es pq el otro no m convencía mucho 😿