𝘕𝘢𝘳𝘯𝘪𝘢 & 𝘏𝘢𝘳𝘳𝘺 𝘗𝘰𝘵𝘵𝘦𝘳 [CANCELADA]

Capítulo 34

Narra ______

Estaba en el pasillo esperando a Ed para poder ir a la fiesta de Slughorn. Me puse un vestido, y este era negro ya que me gustan los colores oscuros.

Me estaba desesperando ya que no veía señales de el idiota de Edmund. Sí me deja plantada juro que lo estrangulo. Planeaba ideas de como matarlo y que nadie se enterara cuando oí unos pasos, volteé y al fin llegó Ed pero estaba corriendo hasta que se detuvo, traía un esmoquin con chaqueta larga.

— Llegué — dijo transpirando.

— ¿Que te paso? — dije confundida

— La chica Hufflepuff — dijo mirándo al pasillo —; amiga de la loca de la Amortentia. Venía persiguiéndome — apunto —, y amenazándome con mínimo hacerme daño.

Yo simplemente reí y le tomé la corbata para poder arreglarla ya que estaba un poco suelta, hicimos contacto visual unos segundos hasta que terminé con la corbata. Caminamos hasta el lugar de la fiesta y entramos, busqué a Susan con la mirada hasta que la encontré y ella me vió, tomé a Ed de la mano y nos dirigimos hacia ella.

— ¡Susan! — dije y la abracé —. Que linda estás.

— Gracias, tú igual — respondió sonriendo.

— ¿Con quién viniste? — dijo Edmund.

— Traje a Lucy — la miro y estaba hablando con otros chicos —. Me insistió tanto que al final acepté.

— ¡Srta. Grant, Sres. Pevensie! — oímos unas voz alegre — ¿Como están? — dijo Slughorn.

— Profesor Slughorn, bien y ¿usted? — dije.

— Bien, bien. Que alegría verlos — dijo sonriendo —. Vengan vamos a tomarnos una foto — accedimos

— Lucy — llamó Susan.

— Aah, así que tú eres Lucy — dijo y ella asintió —. Mucho gusto, ahora si vamos.

Lo seguimos y paramos enfrente de él fotógrafo y cuando la tomo su flash casi me deja ciega.

— ¿Por qué el profesor Slughorn nos trata como si fuéramos celebridades? — dijo Edmund.

— No lo sé, creo que la mayoría del Club Slug tiene una "vida interesante" — dije, aunque según mis teorías si eran celebridades.

— Deberíamos sentarnos — sugirió Susan y accedimos.

— ¿Quieren? — dijo un mesero extendiendo una bandeja.

— A ver — dijo Edmund tomando una cosa de esas — ¿Que estoy comiendo?

— Testículos de Dragón — aclaró y vi cómo Ed se puso pálido, más de lo que ya es.

Salió corriendo a vomitar empujando a todos, Lucy, Susan y yo empezamos a reír.

— Eso le pasa por comer cualquier cosa que se le atraviese — dijo entre risas Lucy.

— Si, es como si no comiera en días — siguió Susan.

— Bueno, cambiando de tema — dije —, parece que este año las chicas están muy hormonales.