Capítulo 50: Un juguete

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Quedé paralizada en ese momento, veía a Bianca detrás de mí y ella no parecía tener la misma cara. No tuve tiempo de plantear más dudas porque Lucy me tomó por el brazo y cuando menos me di cuenta ya estaba por abrir la puerta de su oficina.

En esos momentos no me creía lo que estaba sucediendo, por fin Lucy había hecho lo que quería. Consiguió que rompiera el trato.

Al abrir la puerta pude ver como Anna estaba cómodamente sentada sosteniendo dos copas de champan mientras Lucy me empujaba para que me sentara en una silla al lado de Bianca.

—¡Te lo dije!—dijo ella dándole una de las copas a Lucy con una enorme sonrisa.

—¡Eres una maestra en los planes!—gritó Lucy mientras tomaba la copa victoriosa.

—¿A caso desconfiabas de mí?—preguntó Anna juguetonamente ofendida.

—Tal vez un poco… ¡Pero rayos tu actuación me dejó sin palabras!—dijo Lucy mientras hacía una breve reverencia a su amiga.

—Muchas gracias mi fina dama—dijo Anna creo que parodiándome a mí y a Doménico.

—No, pero espera. Creo que la que realmente merece un Oscar por su actuación es la hermosa dama de cabellos morados—dijo ella viendo en dirección a Bianca.

Ahora entendía todo perfectamente. Bianca me también me había traicionado.

—¡Un brindis por ambas!—gritó Lucy mientras ella y Anna alzaban sus copas.

Luego procedieron a beber todo el líquido burbujeante como si fuera agua, luego se sentaron ambas seductoramente en el escritorio frente a mí.

—¿No es lindo mi nuevo juguete?—preguntó ella tomando mi cara entre sus manos y yo moví su mano bruscamente.

Ella frotó su mano un poco como si de verdad le hubiera hecho daño.

—Aunque creo que necesita aprender algo de modales—dijo ella riendo un poco.

—Ya le enseñarás—dijo Anna dándome una sádica sonrisa.

Volteé a ver a Bianca con lagrimas en mis ojos como diciéndole “¿Porqué lo hiciste?” pero ella solo volteó para ver a otro lado huyendo de mis ojos.

—¿Y qué quiere a cambio mi juguetito por haber ayudado?—preguntó Lucy a Bianca mientras le movía el cabello juguetonamente.

—Lo que acordamos—dijo ella en voz baja.

—¿Qué acordamos?—preguntó ella acercando un poco la oreja para oírla.

—V…—dijo ella casi en un susurro.

—Lo siento linda no te oí—dijo Lucy mientras me volteaba a ver, ella quería ver mi expresión.

—Ver a Dominique—dijo ella bajando la cabeza.

¿Quién era Dominique?

—¿Y quién es Dominique?—preguntó Lucy como si hablara con una niña pequeña.

—Mi hija—dijo ella sabiendo a donde iba la charla.

—¡Oh! ¡¿Cómo me pude olvidar?!—preguntó ella golpeando su cabeza haciendo parecer que se sentía tonta, bueno más bien fue una burla.

 Bianca solo le dio una mirada, se notaba impaciente por la respuesta.

—¿Quién le da la mala noticia? ¿Tú o yo?—preguntó Lucy a Anna.

—Hazlo tú—dijo Anna formando una sonrisa ansiosa en su cara.

Luego Lucy se acomodó frente a Bianca y puso una cara seria.

Cae Nieve en el InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora