𝐀𝐦𝐨𝐫 𝐄𝐭𝐞𝐫𝐧𝐨 [𝐸𝑑𝑤𝑎𝑟𝑑 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛] ✓

Capitulo 4.

   ¿Quién es Romina?
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Forks, Washington.

La casa estaba sumida en un silencio sepulcral, nadie se atrevía a decir nada solo se miraban entre ellos pensando en que hacer. Poco a poco todos se fueron esparciendo por la casa, la pequeña duende teniendo curiosidad sobre la verdadera compañera de Edward, se dirige al despacho de Carlisle donde también está Esme un perfecto lugar para hablar con los dos.

—¿Esme? ¿Carlisle? — preguntó abriendo la puerta despacio.

—¿Pasa algo Alice? — pregunta después de que la pequeña hadita entrara al despacho.

—Tengo curiosidad, ¿quién es Romina? — sonrió hacia sus padres adoptivos para después hacer una mueca— no, no me miren así sé que ustedes saben algo.

—Sabemos quién es ella, pero no estamos seguros de que sea la misma Romina que Edward conoció cuando era humano— dijo Carlisle frunciendo el ceño.

—Bueno entonces háblenme de esa Romina que ustedes conocieron— respondió sonriente

—Su nombre es Romina Berry, la conocimos cuando estaba a punto de morir parecía que había estado en un incendio porque en su piel había quemaduras.

—Fue convertida en 1919, cuando la vi ahí a punto de morir me dio un dolor terrible así que le pedí a Carlisle que la convirtiera— continuó Esme con una expresión de tristeza.

Una pareja de vampiros paseaba tranquilamente por el bosque, después de cazar se dirigían hacia su casa uno de los vampiros el rubio estaba angustiado por su hijo ya que Edward se había ido por su propia cuenta para poder controlarse, el cobrizo había encontrado a su compañera, pero tenía miedo de dañarla después de que había pasado años a lado de ella en su vida humana y ahora que es vampiro descubre que es su compañera para la eternidad y se fue para poder controlarse y estar a su lado.

La acompañante del rubio tenía tan solo unos meses de haber sido convertida y salieron a cazar para que ella pudiera controlar su sed y sorprendentemente la acompañante del rubio, Esme era su compañera para toda la eternidad.

Los compañeros platicaban entre ellos tranquilamente de cualquier cosa. Hasta que empezaron a olfatear un olor a humo, algo quemado y sangre, inmediatamente Esme dejó de respirar se iban a ir de nuevo a su casa cuando escucharon quejidos de dolor.

El sentido materno de Esme hizo que empezara a caminar hacia donde estaba aquel frágil cuerpo humano, aquella frágil humana estaba sucia con manchas de cenizas tenía leves quemaduras en su cuerpo y un golpe en la cabeza estaba haciendo que se desangrara demasiado rápido aquella humana estaba a punto de morir.

Esme ahogó un sollozo, aquella chica era conocida como Romina Berry hija de un gran abogado muy reconocido.
Esme miró con tristeza a la chica acercándose a acariciar su mejilla dulcemente, le dolía verla así en el momento en que acaricio su cabello delicadamente supo que no debía dejarla morir, miro suplicante a Carlisle.