—Como les dije, los daños sufridos no serán permanentes y les aseguro que despertará en un par de horas, así que si quieren volver a casa y reponer fuerzas, les avisaremos cuando despierte—explicó la mujer.
—Gracias, doctora. Pero no será necesario, yo me quedaré con él—aseguró Elena.
La doctora asintió y se retiró de la habitación dejando a los Medina solos. La abuela no manifestó intención de moverse tampoco, a pesar de llevar horas allí.
—No sé por qué has tenido que volver—gruñó Julián hablando por primera vez en toda la tarde.
Victoria enarcó una ceja y resopló mientras se cruzaba de brazos en el sillón.
—Porque es mi hermano. ¿Te parece poco?
—Haya paz—habló la abuela.
—Avisaré a Sara de las novedades—dijo Elena poniéndose en pie y sacando su móvil del bolso.
Victoria rodó los ojos. Era ridículo que incluso en ese momento, siguieran con el montaje de la boda y los prometidos enamorados. Abel no amaba a Sara, y ahora que se había enterado de que estuvo con Álex, entendía el motivo. Si él realmente estuviera sintiendo algo por Sara, no se hubiera enredado con Álex.
Miró a Abel. De pequeños pensaba que era la persona a quién más conocía en este mundo, pero en ese momento... ambos habían cambiado. Ya no eran los mismos y no habían sabido adaptarse a eso. No tenía ni idea de que a Abel pudieran gustarle los chicos... y ni siquiera sabía si le gustaban también las chicas.
Lo único que sabía seguro es lo mucho que amaba a Abel y lo mucho que Abel la amaba la amaba. Su hermano siempre había dado todo por ella, por protegerla, ayudarla, apoyarla y animarla. Lo mínimo que podía hacer, era devolverle todo eso ahora que lo necesitaba.
—¿Desde cuando lo sabes?—la voz de Julián la devolvió a la realidad.
Alzó la mirada y pudo comprobar que la pregunta iba dirigida a ella.
»La abuela me ha dicho que has ido a casa de los Arroyo. Lo sabes—afirmó.
—Sí. He atado cabos esta mañana—dijo con voz apagada—. ¿Y tú?
—Desde que Abel alteró las grabaciones de las cámaras de seguridad que entregamos a la policía la noche que entró alguien en casa.
»Resulta que unas horas antes, había salido ese chico por la ventana. Cuando la policía vio la modificación, me llamaron. Y yo recuperé la grabación original.
Recordaba ese día. Cuando Abel les dio una excusa a los policías para entregar más tarde las grabaciones. Lo pálido que se había puesto cuando se las pidieron... ahora algunas cosas tenían más sentido.
—¿Y creías que la gran solución a tus problemas era casarme a mí con un hombre homosexual que estaba enamorado de mi hermano?
—Era una buena solución—murmuró Julián sin mirarla—. No podía permitir que Abel lo arriesgara todo por ese escándalo. La boda, los negocios con la familia de Sara... todo se iría a la mierda. Lo hice por él. Y por ti.
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Dulce Mentira (+18) [Borrador] ©
RomanceKade aparece en la vida de Victoria dispuesto a derrumbar el mundo de mentiras en el que se encuentra atrapada. Pero a su alrededor, todos ocultan algo. Secretos terribles y oscuros que protegerán a toda costa. Al caer la primera mentira, todas las...