Su mundo se desmoronó nuevamente de golpe y sin aviso, no hubo oportunidad para prepararse y encontrar alguna forma de enfrentarse a ello. Así de duro le era tener que dejar los supresores y dejar saber a todos su verdadera casta.
Ese detalle podía arruinar todo lo conseguido con su trabajo duro y noches en vela. Ahí todo seguiría igual, pero ¿afuera?
Si ya no podía volver a suprimir su olor, todo cambiaría, literalmente, desde el trato de empleados en tiendas hasta la universidad, literalmente corría el riesgo de ser expulsado.Ambos alfas le recomendaron contarle a su compañero de cuarto antes de comenzar a liberar las feromonas que dejarían saber si casta. Un omega. Además para preveer alguna mala reacción, si era así, lo cambiarían de habitación inmediatamente.
Abrió la puerta. Ahí estaba en la parte opuesta del pasillo cierto alfa de cabello marrón, sentado con su espalda recargada en la pared. JiMin se puso de pie al instante y lo bombardeó con preguntas acerca de su estado, realmente preocupado.
No recibió nada más que una mirada vacía, aumentando su preocupación.
Lo siguió hasta el cuarto, ahora en silencio, se hincó recargando su pecho y brazos en el colchón cuando YoonGi se acostó.— Cuando estás preocupado es más notorio tu olor a cuero — comentó en un bobo intento de hacerle saber su casta.
— ¿No se supone que los betas no perciben los aromas? — cuestionó confundido. Algo en su mente hizo clic.
No era difícil deducirlo ahora. Demasiado pequeño, casi esbelto, y los rasgos faciales poco marcados. Entonces el beta del que estaba enamorado, ¿era ahora el omega del que estaba enamorado?
La casta no le importaba ni un poco, seguía siendo el mismo YoonGi inteligente y desafiante por quien cayó rendido.
Guardó silencio, dudando en si de alguna forma pudo haberlo malinterpretado.— ¿Puede confirmar lo que pienso? Temo haberme hecho una idea errónea — pidió, arrepintiendose al momento, disculpándose varias veces.
Se incorporó con la intención de marcharse y dejarlo a solas. No quería fastidiarlo, se veía bastante agobiado por algo y no tenía la intención de molestarlo.
— No te vayas — dijo monótono, ocultando sus ganas de estar acompañado.
No quería estar solo y JiMin provocaba calma en su interior. Todo cambió esa madrugada en que pretendió estar dormido y la cálida mano del alfa acarició su cabello para reconfortarlo y con suaves susurros buscó consolarlo. Sin nadie viendo dejaba claro una cosa, ser así de amable era su personalidad, le salía natural preocuparse por los demás y no era una fachada.
Se hizo a un lado, dejando implícito su deseo de que se uniera a él en la cama.
No dejó de hundir su rostro en el colchón, por un momento hizo pensar a JiMin si podía respirar. Oían el compás de la respiración ajena en el profundo silencio, los demás aún seguían entrenando.— ¿Puedo hacerle preguntas? — solicitó tímido el menor.
YoonGi aceptó con la condición de que él escogería cuales respondía y cuales no.
Lejos de las preguntas que imaginó que haría, especialmente con lo recién ocurrido, nunca pensó en algo tan simple como la primera: su fecha de cumpleaños, luego siguió su comida favorita y la que odiaba, su color preferido. Temas distintos: música, libros, programas y series, pasatiempos, de todo lo que le daría oportunidad de conocerlo más.
Min poco a poco fue girando, dejando de darle la espalda como método de protección.— Su mano — pidió elevando la propia.
El pálido observó la diferencia de tamaños entre sus manos, siendo las de Park la más pequeña. Casi dos centímetros. No pudo evitar reírse. Si se paraba detrás de JiMin apenas sería visible, que su mano sea más pequeña era irónico.
Iba a quitar su mano, pero el menor repitió que esperara unos segundos más.— Voy a ver si ya hay comida — avisó bajando de la cama por la parte de los pies.
Frenó en afuera del cuarto, JiMin lo miraba sentado en la cama —. Santo cielo, ven....
Regresaron después de desayunar. Las chicas que les tocó cocinar les permitieron meterse a la cocina y comer antes de tiempo.
Estaba aprovechando para descansar ahora que tenía el permiso de quedarse en su habitación.— ¿Por qué me estabas esperando? — inquirió acomodándose en la cama.
— Estaba preocupado — simplificó.
Para conseguir que JungKook lo dejara ir, tuvo que "suplicar" como niño chiquito, sin parar y repitiendolo como disco rayado, hasta que por puro fastidio le permitió marcharse.
Ya podía escuchar el ruido de todos al estar de vuelta en el edificio. Todos con rumbo a sus cuartos para tomar sus toallas y jabón para ir a bañarse y finalmente desayunar.
Mientras tanto, él compartía la cama con el alfa que hasta hace unos días no soportaba ni tener cerca. La energía de tranquilidad emanada de JiMin le brindaba seguridad, lo hizo cuando nada en su actitud cambió y continuó siendo el mismo chico fastidioso de siempre.
HoSeok y TaeHyung entraron al cuarto, el primero se interesó en el estado de YoonGi.
Cuando se marcharon a las regaderas el azabache suspiró.— ¿Por qué parece que TaeHyung planea asfixiarme con una almohada en la noche?
No le importaba no ser de su agrado, pero en serio le intrigaba el odio en sus orbes claros.
Y bueno, JiMin tampoco sabía la razón real, nunca imaginaría que su amigo estaba celoso y deseaba ser él a quien amara....
Medio dormidos y con el silencio de nuevo en el lugar. Park percibió poco a poco la presencia de un aroma suave en el aire.
Poco notable aún, complicado de descifrar.
No dijo nada, prestando atención al incremento de la fuerza con la que se hacía notable.Té de frutos rojos y cacao.
Dulce y ácido.
— ¿Cuál es mi aroma? — preguntó con timidez, darse cuenta de las profundas respiraciones ajenas.
Era tonto no conocer su propio olor, no le importaba demasiado. Recibió la respuesta, no sabía si le gustaba o no.
— ¿Por qué no duerme un rato? — insitó al ver su mirada perdida —. No dejaré que nadie entre.
Nana~
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Rough omega (JimSu)
FanfictionCuando se suponía que los omegas debían quedarse en casa a aprender las labores del hogar o los casos más difíciles iban a una institución para ser educados con base a su lugar en la jerarquía, Min YoonGi fingía ser un beta. En su primer año de univ...