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Jadeaba agotado de correr la mitad de la pista con el alfa, orgulloso de ser capaz de recorrer y soportar más la actividad física, recibió una palmada en su espalda a modo de felicitación por parte del alfa.
En la mañana cuando salió a encontrarse con él, dudaba, incluso temía, la reacción de JungKook, especialmente, que tomara la decisión de dejarlo de ayudar.
Se topó con la sorpresa del conocimiento ajeno de su casta.

"Eres increíble, por eso te ayudo"

Esa frase le consoló y animó. Duplicó su esfuerzo esa mañana, se sentía con más fuerza.
Al terminar se tiraron en el césped como siempre, bebieron agua hasta sentirse saciado finalmente.

— JiMin se preocupa mucho por ti, ayer casi se arrodilla por ir a verte — comentó sin la malicia de dejar en ridículo al nombrado. Quería saber si había algo entre ellos dos que explique las ansias de ir a asegurarse de su bienestar con tanto esfuerzo.

— Yo realmente no lo entiendo, siempre me he comportado grosero con él — confesó con un poco de remordimiento.

Siempre fue grosero y cruel con el castaño, no lo saludaba ni miraba. Chasqueaba la lengua con disgusto cuando le dirigía la palabra. A pesar de todo eso, JiMin fue amable y buscaba ayudarlo en todo momento, pensó en la buena educación de su parte. Ahora confiaba en el candor nato.
Sólo porque no confiaba en su personalidad de príncipe encantador, sin defectos a la vista. Provocaba la desconfianza en él.
Ahora de lo único que estaba seguro era no saber qué rayos con JiMin. No lo consideraba su amigo, apenas se dignó a darle la oportunidad y dejar de ser un imbécil con él.
Estaba cómodo con él ahora, su presencia era reconfortante. No sabía qué etiqueta ponerle, pero por el momento estaba bien sin definirlo.

— YoonGi, si algún imbécil te hace algo dímelo en seguida — comentó cuando salieron los primeros para reunirse. Pondría remedio por su propia mano. El menor agradeció con timidez.

Como siempre JiMin era de los primeros en llegar junto con sus amigos. La mayoría del grupo eran betas por lo que no de enterarían de nada a menos que alguien lo mencione. Por supuesto que así fue.
Fingía no escuchar los murmullos y se mantuvo con la mirada en el militar, quién sí prestaba atención a todo. No dudaría en reaccionar en consecuencia a lo que escuchara.

YoonGi solo vio una botella pasar frente a su nariz volando, dando contra la cara de alguien y en un instante la misma persona fue estrellada contra el piso por el mismísimo Jeon.

— Le has faltado el respeto a uno de tus compañeros y a mí — gruñó el alfa, no tendría piedad para asegurarse de que no volviera a pasar —. Acompañeme — tironeó de él a una parte donde el sol golpeaba todo el día. Sacó su radio y le pidió a Amber una mochila.

La alfa llegó pronto cargando con una enorme mochila que llevaba atado un saco de dormir en el costado.
¿El castigo? Sostenerla por encima de su cabeza hasta que a Jeon se le diera la gana.
YoonGi tenía curiosidad por lo dicho. Se acercó a HoSeok a preguntarle.

— Dijo que tenía sentido el favoritismo de Jeon contigo, porque seguramente se la chupabas todas las noches — le respondió molesto y el omega deseó no haber preguntado.

...

Entró a la cafetería en el momento exacto en que JiMin estrellaba su puño en el rostro de un beta. Sus músculos dolían por el entrenamiento extra con JungKook hace unos segundos, aún así salió corriendo para detener al castaño cuando parecía decidido a golpear al beta de nuevo.
Sostuvo su brazo alzado y lo sacó con ayuda de sus amigos. Apenas estuvo fuera y dejó de pelear por regresar, se aferró al menudo cuerpo de YoonGi sin importarle que estuviera aún sudado. HoSeok y TaeHyung decidieron volver a la cafetería para dejarlos a solas.

— ¿Qué fue eso? — preguntó intrigado.

Ver a JiMin enojado y golpeando a alguien mientras le insultaba a gritos daba miedo. Sintió escalofríos al presenciarlo.
Se preguntaba cómo alguien que hace unos instantes estaba tan cabreado ahora se abrazaba a alguien con un puchero.

— Nada, nada — suspiró recargando su mejilla en la cabeza ajena, humedeciendo su piel con el sudor atrapado en los cabellos negros.

Min puso ambas palmas contra el pecho ajeno y poco a poco lo despegó de su cuerpo, o eso intentó y terminó alejándolo casi de un aventón. JiMin no se lo tomó a mal, de hecho no debió haberlo abrazado en primer lugar. Park odiaba la forma en que la casta de una persona definía el trato con el que le tratarían los demás, era estúpido y no consentía que nadie a su alrededor lo hiciera.

— Lo siento por eso — dijo avergonzado de haber sido visto por el mayor —. Ve a desayunar — añadió dando media vuelta para ir a la habitación para tranquilizarse.

Fue totalmente estúpido de su parte creer que YoonGi lo seguiría o diría algo al respecto. Él no era así.

YoonGi se sentó con HoSeok con la intención de preguntarle por lo sucedido y recibir una explicación. Pero el beta se negó a decirlo, argumentando que repetirlo no valía la pena por lo terrible que fue. Nunca le dijo que el comentario que molestó a JiMin era dirigido hacia él, algo le decía que YoonGi no debía escuchar nada de eso.

...

Esa noche JiMin tardó en llegar al comedor para cumplir con el deber de limpieza, fue reprendido junto con el mismo alfa que golpeó en el desayuno. Pues el contrario poco satisfecho por la corta "pelea" le buscó con la intención de ponerlo en su lugar, terminaron con demasiados golpes y los brazos doloridos por cargar las enormes mochilas. Amber les advirtió que si se veían envueltos en otro disturbio les obligaría a lavar los pisos con sus cepillos de dientes.

El omega buró al escucharlo entrar, iba a reclamarle porque casi termina todo por su cuenta. Se detuvo al ver su ojo derramado y el pómulo algo hinchado, al día siguiente tendría un buen moretón.

— Lo siento, Amber me entretuvo — explicó supliendole en la tarea de encargarse de los trastes, era la última tarea, lavar, secar y acomodar.

— ¿Qué te pasó? — giró su rostro con su diestra para ver la lesión —. Creí que no eras agresivo.

— Yo igual — respondió inconscientemente, causando gracia al pálido —. El mismo estúpido de la mañana quería terminar lo que empezó, sólo me defendí — le restó importancia.

— ¿Ganaste?

— Algo así.

A la mañana siguiente, YoonGi rió dentro de sí mismo al ver que el amable Park JiMin no sólo le reventó el labio, sino también le rompió un diente frontal.

Nana~

Rough omega (JimSu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora