Axel Ferrara
Despertar a su lado era arrollador, una combinación de sentimientos por la mujer en mis brazos me envolvía y elevaba a un lugar del que nunca quería salir. Había amanecido y teníamos que irnos, pero simplemente no quería hacerlo.
Es una mujer hermosa; su piel morena era alcanzada por los rayos del sol realzando su belleza, sus gruesos labios están entreabiertos y sus parpados cerrados, podía ver pequeñas motas claras en su hombro descubierto y su largo cabello caoba se perdía en la cobija que nos cubría.
No podía aparta mi vista de aquel ser tan hermoso. Allí acurrucada contra mi pensé en lo inmensamente afortunado que era por tenerla a mi lado. Sé que antes lo había mencionado, pero no me canso de pensarlo una y otra vez porque no soy lo suficiente para ella, pero aun así Thalia Cambar me eligió a mí.
La amo.
—Hola, amor— saludo con su voz ronca. Aferro mi torso aún más apegando su cuerpo al mío.
—Hola, amor. ¿Cómo amaneciste?
—Feliz— alzo su rostro revelando su gran sonrisa. Beso mi mejilla, pero no deje que se terminara ahí; bese sus labios con delicadeza y devoción hasta que ella se detuvo, exaltada—¡YA AMANECIO!
Se levantó de prisa tomando la cobija que nos cubría de un tirón. Gruñí ante el inminente frio, por suerte nos habíamos colocado la ropa interior anoche antes de caer rendidos.
—Está haciendo frio devuélveme eso— me queje mientras observaba su cuerpo.
Como repuesta lanzo mi ropa directo a mi cara. Gruñí nuevamente y me di la vuelta tratando de evitar el día. Termine vistiéndome mientras Thalia recogía todo. Intente de levantarme, pero mis piernas estaban acalambradas y la izquierda no servía de mucho.
Observe el yeso maldiciendo a Cameron. No podía levantarme y eso me ponía mal, era débil y dependía de otros para todo. A veces de verdad quisiera estar muerto para no estorbarle a más nadie y así que ellos sigan con sus vidas sin un peso muerto, además ¿quién quería estar conmigo? ¿Quién quiere estar con un saco de huesos deprimente colmado de problemas? Nadie, exacto.
Estorbo, deprimente, basura, débil...
Volví a recostarme, de todos modos, ¿para que debía levantarme? No había nada en ese instituto que me obligara a regresar en estos momentos, todos los problemas habían sido arreglados, mis amigos estaban más que bien y la única persona por la cual podría volver estaba a unos metros de mí.
Recosté mi cabeza en mi brazo cubierto de cicatrices con la intención de descansar un rato más. Creo que dormí solo unos segundos cuando Thalia me despertó.
—Axel, ¿estás bien? — parecía muy preocupada.
Me sentí culpable por ello. No podía dejar que supiera lo jodido que estaba porque si no se daría cuenta y su amor se convertirá en lastima, tengo que fingir ser "Superman" por un rato más.
—Si.
La bese y trate de levantarme de nuevo, pero ahora con ayuda de Thalia. Aun manteníamos nuestra sonrisa al llegar a el edificio de mujeres. Beso sus labios como despedida y ella corre al encuentro de sus amigas.
...
Nada más entrar al edificio de hombres soy retenido por Rakaj, se acerca a mí a paso presuroso con un aura de preocupación e ira. Dejo que las muletas sostengan mi peso mientras él se acerca.
Escaparme no fue lo mejor para mí en estos momentos, pero valió la pena cada segundo, mi pierna no estaba tan bien como yo alegaba y eso lo sabía, pero de verdad quería hacer algo especial para mi novia y para mí.
![](https://img.wattpad.com/cover/219264059-288-k235117.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Hurt
Teen FictionLa salud de Axel es inestable, por esto es enviado a los diecisiete a un internado de salud. El mismo al que ha asistido por cuatros extenuantes años. Este último año es decisivo para él pero siquiera ha puesto un pie dentro de la helada edificación...