Harry Potter Después de la Guerra (Vol. 1)

Las Arpías vs Los Gloriosos

―25―

Ron tomó a Hermione de la cintura, la levantó unos centímetros del suelo y le plantó un beso. Ante tal imagen, un reportero les sacó una foto y ambos sonrieron al ser capturados en cámara. Hermione le rodeó el cuello con sus brazos, y volvió a besarlo, hasta que alguien carraspeó fuertemente a sus espaldas. Ella se descolgó, y en cuanto lo vio, se sonrojó rápidamente.

— ¡Viktor! —Exclamó, sorprendida.

—Hola Herrmione. —La saludó el búlgaro.

—Él es Ron...

—Su novio. —Completó el pelirrojo, mirándolo fijamente.

Ambos se dieron un apretón, y Ron por un instante sintió que el búlgaro le estrujó la mano más de lo necesario, por lo que él hizo lo mismo, mientras mantenían la vista clavada el uno con el otro. Hermione los observaba nerviosa.

— ¿Qué haces aquí? —Soltó Ron, intentando sonar lo más amablemente posible una vez que se soltaron.

—Vine a ver a mi equipo favorrito. —Contestó arqueando una ceja. — ¿Tú que haces aquí, Herrmione?

—Vinimos a ver a la hermana de Ron, Ginny. —Dijo sonriendo, mirando al pelirrojo. —Juega en las Arpías.

—Ah... sí, crrreo que la recuerrrdo de la boda de mi amiga, Fleurr.

—Sí, es mi cuñada. —Dijo Ron, ligeramente impaciente. —Si nos permites...

—¿Quierren ubicarrse con nosotrros? —Invitó, señalando el lado opuesto de las gradas a las que se dirigían originalmente.

—Gracias, Viktor, pero iremos con la familia de Ron, los Weasley.

—Adiós. —Se despidió el pelirrojo sin esperar una respuesta, y rápidamente sacó a su novia de allí, jalándola de la mano.

— ¡Adiós Viktor! —Lo saludó, sacudiendo la mano mientras se perdía entre la muchedumbre.
—Adiós Herrmione.

Ron y Hermione se ubicaron en la primera fila de las gradas, al lado de Bill y Fleur. Ron llevaba la sonrisa más grande que podía tener, sintiéndose orgulloso de sí mismo. Hermione negó con la cabeza suavemente, pero no pudo evitar sonreír igual que él. El pelirrojo le había revelado sus más profundos sentimientos aquella noche de verano en el escondite del árbol, lo recordaba perfectamente y seguramente sería algo que jamás olvidaría. Sabía cuánto Ron había estado afectado por Viktor, y aunque pasaran los años, aquella espina seguía allí, pinchando hasta quién sabe cuándo.

— ¡Chicos! No se perdieron, ¿verdad? —Preguntó Molly desde el otro extremo, sacudiendo uno de sus brazos saludándolos. — ¿Y Harry?

—No mamá, estábamos buscándolos afuera, pero supusimos que ya estarían aquí. —Le gritó Ron para hacerse oír entre el griterío. —Harry fue a saludar a Ginny con Teddy.

—Estás muy sonriente hoy, Ronnie. —Le dijo George, mirándolo furtivamente, con una sonrisa que hace tiempo no le veía.

—Al igual que tú. —Exclamó el menor, haciendo que Angelina, quien estaba al lado del aludido, se sonrojara de sobremanera y largara una risita nerviosa.

—Toma uno, Ronnie, así puedes apreciar mejor el partido. —Le ofreció Charlie, sentado al lado de Fleur, pasándose de mano en mano unos binoculares. —Hermione, ¿quieres unos...?

—Gracias, Charlie, pero estoy bien.

—Oye Bill. —Murmuró Ron, hincándole el codo en las costillas. — ¿Sabes de dónde es el equipo rival?