BUSCÁNDOTE

CAPÍTULO 17

La respiración entrecortada, los gemidos suaves que salían de su boca, la presión en su pecho y sus ganas inmensas de gritar aun cuando no podía, solo causaron miedo y desesperación.

*

*

Plan iba rumbo al trabajo como cada día, no había vuelto a buscar a Mean, sabía que aun trabajaba en aquel bar y deseaba que nadie lo intimidara una vez más. El arrepentimiento se penetró en sus entrañas después de analizar lo que había estado a punto de realizar... había casi forzado a Mean, dejándolo en un callejón sin salida y aprovechándose de su situación.

- Buenos días – saludó a todos los asistentes de cocina, quienes hablaban con Blue sobre la nueva receta. Este solo lo miró de reojo, brindándole una sonrisa.

Plan le devolvió la sonrisa, para pasar de frente hasta su oficina, donde cambio sus ropas y revisó las nuevas reservaciones y buffets, supo que era un día largo.

- ¿Aun estas aquí? - dijo Blue entrando y parándose frente a él.

- Hum , si – dijo Plan tomando varios documentos –

- Te traje un café, pareces muy cansado últimamente.

- Gracias – mencionó Plan tomando el vaso de café en sus manos y sintiendo la calidez de esta.

Plan le entregó a Blue los documentos de las nuevas reservaciones, mientras revisaba los productos recién llegados, los vegetales eran frescos, el aroma de las frutas para el pastel de cumpleaños de la reservación del día, eran tan refrescantes... amaba los duraznos.

Blue lo observaba desde la puerta, concentrándose en su rostro triste y melancólico, no podía trabajar tranquilo ya que deseaba saber qué era lo que tenía a Plan en ese estado. Deseaba ver siempre una sonrisa o talvez el rostro lleno de enojo, sus ojos que querían matarlo como lo había hecho hace solo unos dos meses atrás.

Ahora podía ver su rostro lleno de satisfacción, mientras revisaba un durazno en sus manos y lo olía... ese gesto, aunque no supiera mucho de él, podía deducir que amaba aquella fruta con solo ver su rostro.... Sus ojos se llenaban de anhelo.

- ¿Tienes todo listo?

- Oh- mencionó Blue al darse cuenta que Plan estaba parado frente a él, mirándolo con sospecha.

Si - Respondió maldiciéndose por dentro, aun estaba nervioso, sus manos temblaban y su corazón se aceleró. Tenía miedo de sus sentimientos.

Durante el trabajo arduo que realizaron, preparando hermosos bocadillos, llegó el momento esperado por Plan, realizar el pastel. Tenía hermosos recuerdos ...

Sintió como alguien se acercaba y salió de sus pensamientos, dejo de batir la crema para mirar a Blue frente a él.

- ¿Necesitas ayuda?

- Nunca esta mal una mano de ayuda – dijo Plan sonriendo ampliamente.

Blue tomó varias fresas y las corto por la mitad, dejándolas dentro de una vasija. Probó algunas y prosiguió con los duraznos ya lavados con mucho cuidado a pelarlas, obteniendo pequeños trozos que también guardo en una vasija. Cuando volvió la miraba se encontró con un Plan que muy sigilosamente tomaba unos trozos para metérselos a la boca.

Sonrió.

- Hey –

Plan saltó del asombro y sonrió con pena. Blue aprovechó también para tomar venganza.

- Hey no- gritó Plan cuando Blue metió un dedo en el tazón de crema que tenía en las manos.

Aun con todo las riñas y juegos ambos terminaron de preparar un hermoso pastel, lleno de frutas y chocolate.

Todos los presentes estaban maravillados con el gran trabajo de los chefs, el pastel, los bocadillos y el bufet habían sido todo un éxito.

Plan planeaba volver a casa después del trabajo, pero Blue lo alcanzo frente a la carretera, junto antes de tomar un taxi de vuelta a casa. Boon no podía venir a recogerlo porque estaba a disposición de su padre quien no podía estar pendiente de sus negocios ahora que su hermana se encontraba muy enferma.

- Khun Plan!

- ¿Qué pasa Blue?

Blue dudó en hablar por un momento.

- Te gustaría tomar unas bebidas conmigo – podemos celebrar nuestro trabajo en equipo.

Plan lo observó, podía ver claramente, la amabilidad de Blue.

- Claro, me encantaría – también necesito beber un poco.

Blue estacionó su auto frente a un hermoso Bar, Plan tenía los nervios de punta, las manos le temblaban y los bellos de la piel se le erizaron. ¿Y si Mean estaba ahí?

Tardó en calmarse, no podía mostrarle a Blue que estaba sintiéndose incomodo de estar en aquel lugar. Desde la entrada observó las luces amarillas, el olor a alcohol y tabaco. Caminaron despacio hasta llegar a la barra para sentarse en algunos asientos vacíos.

Plan no podía ver a Mean por ningún lugar, se relajó esperando no encontrárselo por ningún motivo, deseando que no trabajara aquel día.

- ¿Qué desean beber? – preguntó el Barman.

- ¿Qué te gustaría? - preguntó Blue, volteando a verlo.

- Un whisky por favor.

- Pediré lo mismo.

Iban bebiendo, hablando de trabajo, Blue le contaba sobre su experiencia mientras trabajaba en el extranjero. Plan también le contó sobre su deseo que tener su propio restaurant. Aunque Plan nunca lo hubiera creído, aquel muchacho entendía muy bien lo que Plan quería decir, le dio aliento, ánimos para lograr sus sueños.

- Estoy seguro que sería un éxito, siempre haces lo que te propones muy bien.

- Gracias- mencionó Plan sonrojándose, sin saber el motivo ¿talvez era por el calor del lugar? o ¿las palabras de Blue que hacían que se sintiera tan cálido muy dentro de su corazón?

Se habían excedido, apenas podían sostener el vaso en sus manos. Blue se acercaba peligrosamente cada cierto tiempo, posando sus manos sobre las suyas, talvez sin ser consciente de ello. Blue se acercó para hablarle al oído, pero solo terminó rosando sus labios sobre el lóbulo de su oreja, causando un escalofrió intenso.

- No bebiste ya lo suficiente – le dijo una voz a sus espaldas que los separó, causando que Blue tambaleara en su asiento.

Plan apenas podía ver a quien se encontraba frente a él.

Mean lo había observado desde que entró por la puerta principal, sabia que Plan nunca se rendiría. Pero mientras pasaban las horas observó, la manera libre con la que sonreía, cuando hablaba con aquel hombre y se llevaba un sorbo tras otro a la boca, embriagándose después de 5 vasos de whisky. Trató de no estar pendiente del hombre, pero le era imposible, incluso cuando se movía de un lugar a otro por el segundo piso del bar, siempre dirigía su mirada hacia él. Nada parecía estar fuera de lugar cuando observó la cercanía peligrosa de su acompañante. ¿A dónde planeaban llegar?, se dirigió hasta ellos y los separó.

- Mean – dijo reaccionando y poniéndose de pie, tambaleándose, pero fue Mean quien reaccionó lo más rápido tomándolo de la cintura para no dejarlo caer.

- Plan ¿estás bien? – menciono el otro cogiéndole la mano.

Mean dirigió su mirada a la mano de aquel hombre, le parecía increíble y dejando a Plan en su asiento. Bufo.

- Ya veo – Es el nuevo capricho tuyo, ya que no pudiste tenerme buscaste alguien más.

Así de rápido...

- ¿Qué...?

- Disculpen la interrupción, que tengan una placentera noche – Dijo Mean interrumpiendo las palabras que Plan apenas comenzó a articular , Saliendo de ahí, dejándolos solos, como cuando habían llegado.