❝SI ELLOS ERAN LAS BESTIAS MÁS PELIGROSAS DEL MUNDO... ¿POR QUÉ CREARON OTRA?❞
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CAPÍTULO CUARENTA Y SIETE
SIN NOMBRE
LA ENERGÍA ESCARLATA DE LA REINA SE HABÍA DIRIGIDO A LA INMENSA BESTIA QUE ESTABA EN EL CAMPO DE JUEGO. Aquel gran poder comenzó a crecer en el momento en que los ojos escarlatas de la mujer Riddle se llenaron de poder, ladeando ligeramente su cabeza al mismo tiempo en que la enorme bestia sin nombre comenzaba a gruñir con fuerza al sentir tanto control en ella. Entonces, algo comenzó a brotar de su cuerpo cómo si de una extremidad se tratará. La parte trasera de su cuerpo, un par de centímetros debajo de donde sus musculosos hombros comenzaban, comenzó a abrirse con brusquedad provocando que grandes cantidades de sangre brotaran de aquellos huecos pero, algo comenzó a crecer con notable grandeza: Llenas de escamas, oscuras e inmensas. Un par de enormes de escamas oscuras, con un camino de púas escarlatas en el centro de estás, habían crecido con tanto horror que había provocado incontables gritos de aquellos que estaban observando la primera prueba; Ahora la bestia tenía alas.
Una risa escapó de los labios del Rey en el momento en que observó como las alas manchadas de sangre comenzaban a abrirse, comenzando a volar. Estaba fascinado por observar aquello, por poder presenciar de primera mano lo que la bestia que habían creado podría ser capaz de hacer. Su hermana se encontraba en la misma situación que él... ¿Su hijo? No tanto.
Él príncipe había apretado los labios en el momento en que observó como aquella bestia se levantaba de los suelos, dirigiéndose hacía los estudiantes más cercanos, quienes gritaron con horror al sentir como sus filosas garras se acercaban a ellos, antes de atrapar a un par de concursantes con estás. Él chico Malfoy estuvo a punto de ser tomado por sus garras, si no fuera porque un estudiante dos años mayor lo empujó un par de centímetros más allá. Ares se levantó de su lugar en el momento en que observó como las filosas garras de la bestia se enterraban en el muro, con su gigantesca cola intentando atrapar a alguno de los estudiantes al mismo tiempo en que la otra criatura, que se encargaba de impedir que los estudiantes avanzaran, atrapaba el cuerpo de uno de los estudiantes con sus filosos colmillos.
Algunos estudiantes más temerosos corrieron hacía la salida al mismo tiempo en que la criatura arrojaba a un estudiante cerca de los muros, provocando una carcajada de parte del Rey, quién se encontraba más que fascinado por observar aquello.—¡Vamos, cariño, puedes hacerlo mejor!
Scarlett sonrió de manera ladina en el momento en que observó como la criatura que habían creado soltaba un enorme rugido al cielo al haber atrapado a otro estudiante, lanzando a este lo más lejos posible, antes de que su atención se dirigiera a su hijo. Ares, quién se había levantado hace unos segundos, se encontraba caminando hacía el borde del enorme balcón para así poder observar lo que ocurría en el campo de juego, sin despegar sus ojos esmeraldas de su par de amigos que concursaban. Se cruzó de brazos al observar la escena frente a él, mientras que podía escuchar los horrorosos gritos que resonaron entre las paredes, combinando a la perfección con los chillidos de horror que salían de los estudiantes menores, aumentando mucho más el ambiente tenebroso. Habían pasado casi quince minutos de la prueba pero, aun así, la Runespoor había herido a más de diez estudiantes mientras que la bestia sin nombre había herido a casi veinte de estos. Poco a poco, la competencia iba disminuyendo con el paso del tiempo.
