La plática con Ox y bajo la oscuridad

674 45 110
                                    

Ya era de mañana...Nolan yacía en la cama,despertando lentamente de aquel sueño que lo hizo dormir por horas y horas sin saber que ya era casi medio día,por lo que al no sentir a Lou a su lado,es cuando solo se levanta de golpe y mira atentamente a su alrededor,viendo que se encontraba aun desnudo,con aquella corbata colgando de su cuello,la sabana arrugada en sus piernas y la pijama de Lou a un lado,todo eso le hizo pensar que lo que sucedió anoche no fue más que producto de su imaginación,por un momento pensó que había tenido sueños sucios con la pijama que el prototipo antes había portado,pero todos esos pensamientos desaparecierón una vez que se cambió y fue a la cocina,donde encontró al rubio de espaldas,con un mandil blanco puesto y una nueva ropa que había agarrado seguramente del closeth.

-¡En verdad estas aquí!-gritó al llevarse sus manos a sus mejillas-¡Valla,en verdad no fue un sueño!

-¿Quieres dejar de gritar?-exclamó al levantar la espatula a su dirección,señalandolo con aquella herramienta de cocina-Vas a hacer que cambie de idea y deje de cocinar,valla ruidoso,no puedo creer que los jovenes sean tan gritones.

-Solo estoy feliz de saber que tu estas aquí-dijo Nolan al acercarse para mirarlo más de cerca-Y por...saber que lo de anoche fue real...

Lou solo se ruborizó al escucharlo y pronto solo volteó nuevamente hacia lo que estaba haciendo,sintiendo como poco despues el pecoso lo rodeaba con sus brazos,abrazandolo tiernamente desde atras,recargando su barbilla en el hombro del prototipo,quien solo ignoraba todo eso y continuaba preparando la comida.

-Dime...¿no te duele ahí abajo?

-¿Quieres callarte un momento?,tonto pervertido-dijo en un murmureo-Ademas...no me duele,¿ya estas feliz de escucharlo?

-Oh,si muy feliz-dijo con ojos brillosos,prestando atención en como Lou se encargaba de hacer un perfecto desayuno,no importaba cuantas veces lo apretara desde atras,no importaba si le daba un suspiro en su cuello para inquietarlo,el seguía en lo suyo,con las mejillas rojas y su ceño fruncido.Pero no solo era eso lo que veía en su rostro,tambien una pequeña pisca de preocupación-¿Sucede algo?

-Yo...solo me preguntaba si Ox me llevará nuevamente a ese cuarto-dijo en un suspiro,dejando la espatula a un lado solo para mirar a Nolan-¿Crees que él sea capaz de encerrarme ahí por más tiempo?

-Lo que creo es que...yo no dejaré que te lleve ahí-hizo una pausa y pronto acercó su mano para apagar la estufa-Ademas...Ox puede ser un conejo extraño que ha cambiado un poco ultimamente,pero...se que podríamos hacerle entender que...todos merecen una segunda oportunidad

-Todos lo merecen-dijo en un susurro,antes de rodear a Nolan y sentarse en una de las sillas de la mesa-Pero yo...¿qué es lo que merezco?

-Tu mereces ser...igual a los demas-respondió el pecoso al sujetar la comida que yacía en el sarten para despues servirlos en los respectivos platos-Y Ox necesita saberlo...ahora deja de estar nervioso y...esperemos a que llegue.

Pero cuando el prototipo estuvo a punto de decir algo al respecto...es cuando el timbre de la casa suena,interrumpiendo aquel momento silencioso que se estaba armando,haciendo que el prototipo solo soltara un suspiro y se recargara en sus manos,pensando acerca sobre si...Ox llegaría a entender sobre la situación en la que se encontraba.

-No te preocupes-dijo Nolan con mirada deciciva-Esto se resolverá

Y pronto al decir aquellas palabras solo va hacia la puerta,a pasos rapidos,casi un poco agitado ante la idea de sentirse inseguro al respecto,pero lo que si sabía muy bien...era que protegería a Lou pase lo que pasase.

-Me alegra que hayas veni...-dijo al abrir la puerta con la misma sonrisa de siempre,pero desafortunadamente esta sonrisa se borró de su rostro al ver a Ox junto a dos roboths acompañantes,los cuales estaban siendo acompañados por Jonas y Lilibeth,los cuales con caras serias solo mirarón como el pecoso colocaba mirada de no entender-Jonas,Lilibeth,¿qué hacen aquí?

The life of a prototypeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora