Eclipse || Larry

9. BORBONES

Ese día fue agotador en todos los sentidos.

Louis había tenido dos exámenes, uno en el que se había inventado la gran mayoría de las cosas, y otro en que que había tenido pegado al profesor en todo momento, evitando así que pudiera preguntarle algo a Niall. 

Ni siquiera se atrevió a abrir el libro cuando salió del examen, pues la simple idea de ver hasta qué punto se había inventado las cosas le atormentaba. De hecho, su mente ya estaba pensando las excusas que le pondría a su madre para justificar las malas notas que, seguro, llegarían. 

Louis mordió su labio mientras escuchaba a Niall intentar consolarlo. Los dos estaban apoyados contra el lavabo del baño en el instituto. Los pasillos se mantenían en completo silencio hasta que la alarma sonó, indicando el último timbre del día, mandando a los alumnos a sus respectivos hogares. 

Mientras el sonido iba llenando el instituto entero, Louis suspiró bajando su cabeza. Niall acarició su brazo para darle el apoyo moral que necesitaba. Los dos volvieron a reír de repente, recordando lo que Louis había puesto en el examen. 

—Eres el mejor— Aseguró Niall, negando con su cabeza. 

—Seguro que mi madre no piensa lo mismo. Me va a matar… 

—Siempre podrás esconderte en mi casa o en la biblioteca. 

Louis soltó una carcajada y negó con la cabeza. Mordió su labio inferior cuando cargó la mochila contra su hombro de nuevo y salió de ahí acompañado de Niall. 

El aire que ya comenzaba a desprender noviembre fue una buena terapia para sacarlo de sus pensamientos, bajar esas escaleras que lo separaban de su transporte a casa y olvidarse de todo antes de deprimirse más de lo que ya estaba. 

—No te preocupes tanto Louis… Mira, podemos hacer una cosa si quieres… 

—¿El qué?— Preguntó, parando sus pasos en mitad de las escaleras. Niall imitó sus actos. 

—Hoy voy a ir a comer con Zayn y con Harry. Vente y después estudiamos juntos o le pedimos ayuda a ellos. 

Su mente negó nada más escuchar el segundo nombre. Recordar la conversación que tuvieron el día de antes en el supermercado solamente le había desconcentrado más, muchísimo menos quería que alguno de los dos alfas se diera cuenta de lo imbécil que era para los estudios. 

—Niall, te lo agradezco, de verdad, pero no quiero ir sin avisar a nadie. No me parece una buena idea…

—Es una buena idea, a ellos les caes muy bien. Y así podrás conocerlos un poco más. Ya verás que son buenas personas, no hay de qué temer. 

—Betty me está esperando...— Siguió diciendo ahora mirando fijamente al vehículo estacionado de la omega. 

—Yo hablo con ella. Le caigo bien, seguro que me hace caso. 

Louis sonrió sin poder evitarlo. Bajó la cabeza a la vez que negaba y escuchaba a Niall suspirar enfrente suyo. Suspirar fue lo último que hizo, pues antes de que Louis pudiera hacer algo, Niall comenzó a correr hasta el coche de Betty.

Louis lo siguió veloz para detenerlo, pero no consiguió nada por la mínima distancia que le llevaba el otro. 

Cuando consiguió llegar, escuchó a Betty riendo. Niall hablaba de cosas que quedaron en el olvido cuando visualizó a Harry salir de su BMW con el teléfono pegado a la oreja, buscando por ahí pero sin encontrar a nadie. Louis desvió la mirada. 

—¿Entonces quieres dinero para ir a comer, cariño? 

—Betty, no hace falta…— Dijo Louis con velocidad viendo como la omega sacaba dinero del bolso. Niall desapareció de ahí con la excusa de esperarlo en el otro coche.