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— Papi... ¿Cuándo voy a poder ver a mis hermanitos?. ¡Quiero verlos!.... —

— Aún no pueden estar con nosotros, mi amor. También nosotros estamos ansiosos de poder traerlos a casa pero no podemos. —

— ¿Por qué?.... — siendo atrapada por los brazos de su papá, la pequeña sonrió por los besos que Siwon le dió en su cabecita.

— Tus hermanos hicieron una travesura de nacer antes de tiempo y como aún no están listos para conocer al mundo, están en una cajita en el hospital, en donde los están cuidando como si estuvieran aún en la pancita de papá. Cuándo estén listos, ellos vendrán a casa y podremos estar todos juntos. —

— ¿Por qué hicieron travesuras? — sonriendo triste al escuchar esa pregunta de Niah, Siwon me miró, mostrando tranquilidad en él.

— Porque estaban tan deseosos de querer conocerte, que hicieron de todo para poder nacer rápido, pero ellos no saben que todo tiene un tiempo y aunque deseemos estar juntos y conocernos, aún no podemos vernos. Todos estamos deseosos de poder tenerlos aquí, mi amor. De verdad que deseamos poder verlos. —

  — ¿Fue mi culpa?... — el tono triste de su voz, hizo que Siwon cargara a Niah, acariciando con su nariz, el rostro decaído de la pequeña, quién se había aferrado al cuello de su papá.

  — Nadie tiene la culpa de amar, Niah. Nadie es culpable por dar amor, sino al contrario, ellos están luchando por salir del hospital y poder estar en nuestros brazos, como tú lo estás ahora. Sus ganas de conocernos son tan fuertes, que nacieron antes para poder  ser una familia completa. En poco tiempo dormirán en su habitación y no en un hospital. Vamos a estar todos juntos y felices a pesar de esa travesura que sucedió, ¿Verdad Chul?. —

— Si... — sintiendo la mirada de Siwon sobre mí, no me quedó más que fingir una sonrisa delante de la niña, siguiéndole el juego de que los bebés se habían adelantado para poder conocernos. — Niah, vamos a llevarte a la cama porque mañana tienes escuela y sabes que las princesas son muy obedientes y no se duermen tarde. ¿Te llevó a tú habitación?. —

  — Si... — extendiendo sus bracitos para poder abrazarse a mí, Siwon la soltó y así la llevé en brazos hasta su habitación.

Una vez la vestí con su pijama y había hecho la rutina de belleza en su bello rostro, la recosté bajo las sábanas que cubrían a su peluche y a ella.

— ¿Puedo ver tele?... No tengo sueño. — mirándome con esos enormes ojos tiernos, recargó su cabecita en el peluche, luciendo extremadamente adorable.

— Tienes que dormir para que descanses y aprendas más en tus clases. Puedo quedarme aquí hasta que te duermas, ¿Te parece?. — asintiendo con una risilla en su rostro, me recosté en su cama con cuidado, ya que aún me dolía la cesárea de los bebés.

Niah había mandando al demonio a su oso para así, recargarse en mi pecho y poder consentirla. Gustoso, la abracé y con la mano que quedó en su cabecita, comencé a enterrar mis dedos entre su cabello sedoso , haciéndole cariñitos.

Estaba sumamente agradecido con Siwon de dejarme ser parte de la vida de su hija desde que era una bebé hasta la fecha. La primera vez que me había dicho "papá", me había llenado el corazón de felicidad, sabiendo la pequeña me consideraba así, sabiendo que no era fruto mío. Toda persona que conocía a Niah, quedaba encantada por la forma tan dulce y tierna de ser de ella, queriendo tenerla como una hija modelo.

No me había dado cuenta que me había quedado dormido con ella, hasta que sentía cómo mi cuerpo se movía ligeramente, y al abrir con pesadez mis ojos, noté era Siwon quién me estaba tocando.

  — Vamos a la cama. Vamos a dormir. — abriendo un poco más los ojos, Siwon estaba quitando con cuidado la cabecita de Niah de mi pecho, para recostarla en su almohada y siguiera dormida. — Vámonos. Hace frío y puedes lastimarte así cómo estás acostado. — dándome la mano, me senté primero con cuidado y después me ayudó a ponerme de pie. — Se veían muy adorables así como estaban. Me daban ganas de unirme a ustedes en el sueño. — mirando su sonrisa, sonreí ligeramente  para echar un vistazo a la niña, quién de verdad parecía una muñeca de porcelana.

Dándole los dos un beso en su frente, Siwon me tomó de la mano y así encaminarnos a nuestra habitación.

Desde que habíamos regresado a casa después de haberme dado de alta, evitaba a Siwon ya que aún me sentía mal por el accidente que había tenido estúpidamente. Él lo notaba, ya que al querer acercarse a mí, yo cambiaba de lugar o no podía estar mucho tiempo en el mismo entorno que él, por la culpa que sentía a los bebés y también por saber que había perdido el negocio de Dubai por mi culpa. Esto último no lo sabía por Siwon, sino por Donghae que me había contado muchas cosas en el hospital.

Una vez me acosté en la cama, me acomodé en posición fetal, dándole la espalda a Siwon y así no verlo de frente. Mi cuerpo se tensó al sentir su cuerpo pegado al mío y después su mano rodeó mi cintura, haciendo que quedáramos más unidos.

  — ¿Vas a seguir así? — escuchando esa voz ronca en mi oído, sólo cerré con fuerza mis ojos, queriendo evitar soltar algún sonido de llanto o algo por el estilo. Mi intento había sido fallido, ya que los besos que comenzó a repartir en mi cuello, habían provocado que mis lágrimas salieran y terminaran mojando mi almohada. — No quiero verte mal. Me duele que sufras y te auto castigues cuando no es tu culpa, Chul. Créeme que no estoy enojado ni te odio. Ellos están mejorando poco a poco y tú estás aquí conmigo. ¿Qué más puedo pedir?. Los tengo a todos con vida y eso es lo que importa. —

  — No soy un buen esposo o un buen papá... Lastimo a quiénes amo ... —

— Eres el mejor. Niah te lo ha dicho y eres el mejor esposo que pudiera pedir. Ya no quiero que sufras. Quiero verte sonreír de nuevo y que seas él Heechul con quién me casé. — girando mi cuerpo, me encontré de frente al pecho duro de mi esposo, en donde no pude más y escondí mi rostro en su cuerpo, llorando ahogado en él. Sus brazos rodearon mi cuerpo y yo solo lloraba sin poder controlarme. — Te amo Heechul. Tratemos de olvidar todo y empezar de forma positiva para recibir a los bebés en casa y poder estar todos juntos. No puedes evitarme, porque siempre querré ser tu sombra y más en esta situación.

  — ¿Por qué... eres tan bueno conmigo?... —

  — Porque te amo y prometí estar contigo en las buenas y en las malas ante Dios. Esta es una prueba en donde tenemos que estar más juntos que nunca y salir adelante de todo problema. — sin dudas Siwon era un ángel en mi vida y algo bueno tuve que haber hecho para tenerlo a mi lado.











hola 🙋‍♀️
Espero les guste el capítulo y ya saben el resto, jiji.
Está próximo a terminar pero recuerden que pueden leer más historias mías, siguiendo mi perfil.

Hace poco les había comentado de mi amiga que iba empezando en este mundo, ya publicó un par de capítulos, así que vayan a darle 💕. Se llama "polos opuestos" y es del eunhae.

Cuídense y no salgan si no es necesario.

INCESTUS (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora