INCESTUS (Terminada)

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  -- Hola dormilona... ¿Dormiste bien? -- Niah abría sus ojitos poco a poco y a la vez bostezó, cosa que me dió mucha ternura. Al encontrarse conmigo, su mirada no se despegaba de mí, nisiquiera en un parpadeo. Se veía curiosa por saber quién era. Haciendo cariñitos en su pancita logré sacarle una hermosa sonrisa grande,mostrando sus encías. -- Soy tú papá Niah, y ya estamos en casa -- acomodándola mejor entre mis brazos, empecé a moverla muy suave, aún manteniendo el contacto visual.

Ese día debía ir a casa con Hee, ya que estaba un tanto celoso de haber pasado la noche con Sully, más le explicaba que no había sucedido nada de lo que imaginaba, sino que la pobre la había pasado mal en la cirugía y ahora en casa, no podía quedarse sola, hasta que sus papás regresaran. Por eso estaba cuidando de ella y Niah.

La niña de buenas a primeras empezó a llorar con mucha fuerza, apretando sus manitas y poniéndose roja. Con cuidado me levanté del sillón yendo al cuarto de Niah para acostarla. Tomé un oso de peluche haciendo que este bailara sobre su pechito pero seguía llorando.

  -- ¿Qué tienes hermosa?.... ¿Te hiciste? -- la saqué de su cuna alzandola y oler su trasero. No tenía olores extraños. -- ¿Tienes hambre? ...¿Te hago lechita? ... -- haciendo gestos random se calmó un poco. -- Vamos por tu comidita -- tomé el portabebé y bajamos hasta la cocina en dónde le haría su fórmula.

Acomodándola de nuevo, abroche el cinturón, dándole el mismo oso con el que jugué y no quiso. Lo tomó con sus manitas gorditas, teniendo de nuevo su vista pegada a mi.

Puse a calentar agua a la temperatura que era. En lo que estaba , saqué el polvo de la fórmula de la alacena. Una vez listo puse las cucharadas en el biberón y después agua para cerrarlo y agitarlo. Dejé caer unas gotitas en el dorso de mi mano, sintiendo que estaba en su punto. No sabía si era lo correcto, pero había visto que hacían eso en videos de Youtube, así que no debía haber fallas en eso.

  -- ¡Mira! -- agité el biberón delante de ella. -- !Lechita!... ¡Qué rico! -- reí al verla sonriente.

Dejé la botella en la mesa para poder sentarme y sacarla del portabebé. Una vez la tuve de nuevo entre mis brazos, tomé el bibi, acercándolo a su boquita, el cuál rápido empezó a chupar posando sus manitas en él.

  -- Tenías hambre mi amor -- susurré observando a esa niña que me había robado el corazón.

Nos habíamos hecho la prueba en el hospital mientras Sully estaba en operación. Los resultados habían indicado que ella y yo éramos compatibles un 99.99 por ciento, así que Niah era mía. Había sido cierto que Sully se había aprovechado de mí la última vez que habíamos dormido juntos.

Volviendo a Niah, la pequeña seguía succionado la botella cómo si nunca hubiera comido. Era raro pero lindo el tener un bebé en brazos, y más cuando era propia. Sabía que debía estar para ella toda mi vida, cuidando de ella y amándola. Me ponía triste el hecho de que sus papás estuvieran separados, en dónde no tendría un hogar estable, o que preguntara el porqué sus papás no vivían juntos cuando los demás niños tenían a sus padres unidos.

Lo que me daba un poco de tranquilidad, esque Sully y yo nos estábamos llevando bien por la niña. Si seguíamos así, no habría ninguna necesidad de irnos a cosas legales.

  -- Se te va a caer la baba Choi -- escuché a Sully riendo de pie en la entrada de la cocina -- No dejas de verla ... --

  -- No puedo evitarlo ... No puedo creer que me hayas violado jajaja, pero el resultado fue este hermoso regalo de niña comelona -- sonreí embobado al verla una vez más.

  -- Luces bien de papá -- me sonrió caminando hasta nosotros. -- Hola hermosa... ¿Verdad que papi se ve sexy así? -- dejó unas caricias en el cabello de Niah, para después darle un beso en su frente , al igual que a mí .

Cuándo terminó el biberón, la paré sobre mi pecho, empezando a darle palmaditas en su espalda hasta que hiciera provecho.

  -- ¿Cómo te sientes? --

  -- Mejor. Aún me duele pero ya puedo andar de pie. ¿También te quedarás hoy?, Podemos ver una película -- negué despacio.
  
  -- Debo ir a casa. -- noté como se puso seria. -- Estaré el viernes a primera hora aquí para llevármela. Voy a comprarle ropa y cosas que voy a necesitar en casa para cuidarla. --

  -- No quiero que te vayas --

  -- Así habíamos quedado. No hagamos esto complicado... ¿Que pasó bonita? -- sentí como estiraba su manita a mi boca. Atrapé sus deditos entre mis labios, haciendo que soltara una tierna sonrisa. -- Mmm... ¡Te voy a comer a besos! -- agachandome a la altura que la tenía abrazada, empecé a dar besos por todos lados, desde su cabeza hasta los pies , escuchando risas que me alborotaban el corazón. También Sully se estaba riendo .

  -- Pudimos ser una linda familia ...-- noté la tristeza en su voz ya que tenía razón. Habríamos sido felices pero con mentiras, nada era bueno.

  -- La haremos feliz y le daremos mucho amor. Podemos salir un par de veces al mes juntos para que vea que nos llevamos bien cuando crezca. --

  -- No suena mal eso... ¿A qué hora te vas? -- observé mi reloj viendo que ya iba a anochecer.

  -- Ya, de hecho. Llámame a cualquier hora para lo que necesites,¿Ok?...-- sintiendo un gran dolor en mi pecho, había llegado el momento de dejarlas y esperar días eternos para tenerla en casa con Hee.

La acomodé en los brazos de Sully para tomar mis cosas e irme. Dándoles un beso en su frente a las dos, me despedí triste, sintiendo la mirada de la niña, queriendo saber porque me alejaba de ella.

  -- Dile adiós a papá -- Sully tomó su manita, agitando está en despido, acción que imite. Dolía irme.

Subiendo al carro rápido, conducí a casa en dónde sabía me esperaba Heechul molesto. Sus mensajes daban a entender eso. Llegué y estacioné en el subterráneo. Tomando el elevador, llegué a nuestro piso. Abrí despacio, y lo ví sentado en las sillas del comedor.

  -- ¿Por qué vienes hasta hoy? La niña nació hace tres días y apenas te apareces por aquí Siwon ... --

  -- No quiero discutir Hee. -- lo miré cansado. -- Tienes razón. Hace tres días nació y estuvimos dos días en el hospital. Ayer estuve con Sully ayudándola con Niah. Si estás pensando en que dormimos juntos, o que hubo besos, o algo similar, déjame decirte que no. No pasó absolutamente nada, más que estar al pendiente de las dos. Sully se veía mejor hoy, así que ya pude venirme. --

  -- ¿Me vas a dejar por ella? -- lo observé y sus ojos estaban llorosos. ¿Qué estaba diciendo?.

  -- No Chul, claro que no ... No voy a dejarte -- me senté a su lado acariciando su espalda. -- Nos estamos llevando bien por ella por su bien y el de nosotros. Hee... Es hermoso el tener en brazos a Niah y que ella te mire pidiendo nunca la deje. No quiero alejarme de ella, y por eso esque debo de llevarme bien con su mamá... ¿Me crees? -- asintió abrazándome. -- Vete a la cama, ahorita te alcanzo, solo me doy un baño y listo.

  -- ¿Puedo bañarme contigo? -- susurró sobre mi pecho. -- Quiero estar más tiempo a tu lado... --

  -- Está bien -- sonreí acariciando su cabello. -- Vamos a bañarnos.

Hola !!!!! Espero les guste el capítulo.
Les tengo malas noticias:(. Ya casi vuelvo al trabajo y tendré menos tiempo de estar activa por aquí 🥺.
Aún así en lo que regreso, trataré de subir lo más que pueda ❤️
Gracias por seguir esta historia.