Winter love ✔

Capítulo XXXVI

—¡Mira eso! Es adorable—exclamó Chloé, viendo atenta la pantalla de mi laptop.

—No sé cuál elegir, nacerá en invierno, justo cuando cae nieve y debe tener ropa abrigada—les expliqué, viendo la ropa en la pantalla—. La calefacción ayudará y no traeré a mi bebé por las calles de Londres en pleno invierno, pero quiero comodidad en su ropa y...

—Estilo—finalizó Chloé.

—Yo digo que compres los dos—dijo Kate y Chloé asintió.

Mi madre acarició mi barriga y le sonreí.

—Sé que están emocionadas por el nacimiento de mi hijo y no sé a quién quiero engañar, yo también lo estoy—dije, viendo mi vientre y pensando en el niño que venía en camino. Todos rieron y aquello me hizo sentir bien.

Un niño.

Nicholas y yo tendríamos un niño. Estaba feliz con la noticia, algo me lo decía y ahora comenzábamos con la compra de ropa, decoración y una planeación sobre un baby shower.

—¿Se irán en unas horas? —preguntó Kate, quien estaba en las piernas de Chris.

Asentí emocionada.

Estar sola con Nicholas era lo que más deseaba y lo haría por un mes entero. Aunque mi pequeño estaría con nosotros.

—Es impresionante la cantidad de felicidad que trae un bebé a una familia—dijo Emma y Jackson besó su frente.

La sombra en la mirada de Emma era notoria, pero a pesar de eso la chica se mantenía alegre, amable y un poco tímida. No podía creer que una chica que venía de una familia tan rica e importante de Estados Unidos y el mundo, se mantenía serena, amable y humilde. No entendía cómo cabía eso en ella, pero ahí la tenía. Siempre diciendo gracias, por favor y haciendo las cosas por ella misma como si no tuviera a veinte personas esperando a servirla.

—Los bebés deseados siempre traen felicidad—dijo Nicholas, sorprendiéndome y tocando mi vientre con ternura—, y este pequeñín lo es.

Le sonreí, pensando en que pude haber interrumpido mi embarazo.

¿Me sentía mal? Extrañamente no. Consideraba que las circunstancias no eran gratas en primera instancia, luego lo pensé y decidí conservarlo, decidí dejarme fluir y amarlo, ansiar su llegada y esperarlo con gusto.

—No fallaste, hermanito—dijo Kate con una sonrisa y una ceja alzada.

—¿Fallar? —preguntó Nicholas, pasando un brazo por mis hombros.

Ella asintió y vio a Jackson.

—Cuarta generación de primogénitos varones—respondió con los ojos entrecerrados.

—Tu bebé será niña—le dijo Emma a Kate y Dan negó.

—Si es un niño, sería la séptima generación Smith con un varón como primogénito, la familia Smith está compuesta en su mayoría por hombres si quitamos a las parejas.

—La fiebre de bebés no me tocará a mí, Dan. Pídele un bebé Smith a tu novia—se quejó y Chris rio.

Chloé se sonrojó y Daniel besó su mejilla.

—¿Qué dices, bonita? ¿Un bebé Smith? —preguntó dulcemente.

—Me gusta la idea.

Si había alguien en esta habitación deseando ser madre era Chloé. Sin dudarlo sabía que sería una buena madre llena de cariño y dulzura. Kate lo demostraba con su gato, quien estaba mimado y siempre cerca de ella. Era molesto leer aquellas columnas donde se criticaba a esas dos chicas, que solo daban amor y apoyo, y que justo ahora me hacían sentir como parte de ellas.