~ ALBA ~ 11

48.2K 3.2K 1.2K
                                    

Lunes

Llegó al trabajo, saludo a todos, llevo café a la oficina del abogado Wilson, charlo un poco con Liliana y mi día corre como siempre, excepto por una cosa, la aboga Taylor me mensajeo por primera vez y no sé si deba contestarle.

- No comiste mucho - Rose nota - ¿Estás en una especie de dieta? Me da envidia lo delgada que estás.

- No estoy en dieta... - contesto en voz baja.

- ¿Entonces por qué comes tan poco?

Porque volví a quedarme sin dinero, me tocó hacer algunos pagos.

- Eso es porque toma café como loca en la oficina - Liliana niega en desaprobación - Le he dicho que tomar tanto café puede perjudicarle.

- Es verdad, no tomes tanto café - Rose la apoya.

Yo asiento para no seguir con la conversación, antes la que me ayudaba a salir del tema cuando no estaba cómoda era Tamy, pero ahora que no está solo me queda callar.

- Oigan, no les había dicho, pero escuché que el abogado Miranda se reunió con la abogada Taylor esta mañana - Rose susurra - Y el rumor es que están teniendo problemas maritales... ¿Creen que se divorcien?

Oh no, sacaron el tema prohibido.

- ¿Divorcio? - Liliana pregunta sorprendida - ¿En serio?

- Eso se dice, pero no hay nada confirmado, solo hablaron por un rato y él se fue... También puede ser que solo se trate del algún caso o de problemas financieros, pero ambos estaban de muy mal humor.

- Tal vez sea eso, no olvides que la firma perdió dinero al perder casos importantes - Liliana le recuerda - Pero el abogado Miranda no bajo a su oficina y Tamy tampoco llegó, así que no debe estar llevando algún caso.

- Sí, está raro... - Rose me mira por lo que parecieran horas - Alba, nunca te lo había preguntado, ¿tú tienes novio?

Mierda, mierda, debe estar empezado a relacionarme con lo que está pasando. No puedo dejar que sepan nada, ni siquiera puedo dejar que sospechen, la abogada dijo que no quería que se enterarán, por eso me dejo en la firma para evitar eso.

- Tengo novio - contesto.

- ¿Si? ¿Por qué nunca hablas de ello?

Me encojo de hombros, ¿cómo debo mentir? Soy mala en ello.

- Espera... - Liliana interviene - Cuando te conocimos, ¿no te pregunté eso y dijiste que habías terminado una relación?

- oh... - entro en pánico al recordar lo que le dije - Sí, es verdad... En ese momento habíamos terminado por un malentendido, pero regresamos.

- Entiendo, ¿y cuál es su nombre? - Liliana pregunta - Ahora estoy curiosa, cuéntanos de él.

- Él se llama... - miró al rededor buscando un nombre - Daniel...

Rose y Liliana se miran entre sí como si se pusieran de acuerdo para arrancar con preguntas de todo tipo como, ¿cuánto tiempo llevan juntos? ¿Viven en el mismo lugar? ¿Cómo se conocieron? ¿Te quieres casar? Son preguntas a las cuales conteste sin pensar, no sé si recordaré todas las mentiras después de esto, realmente es absurdo la cantidad de información que uno tiene que brindar al dar a conocer que sale con alguien.

Luego de esa bomba de preguntas regresamos a la oficina donde mi día sigue igual, con excepción a mis pensamientos que siguen en el mensaje que recibí por la mañana.

** No te vayas temprano, necesito hablar contigo **

Leo su mensaje una y otra vez, aún no soy capas de contestar, no sé si es lo correcto, tal vez deba preguntarle hoy.

La amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora