La amante

~ DANEY ~ 34

Salgo de la casa metiéndome en la camioneta donde Robert ya está listo para salir.

- Vamos - ordenó.

Él asiente y comienza a manejar mirándome de vez en cuando por el retrovisor.

- Ella está bien - murmuro hacia él mientras contesto mensajes en mi celular.

- ¿Disculpe? - Robert pregunta.

- Sé que te estás preguntando si Alba está bien... Ella lo esta, resulta que no está enferma, así que no tengas más preocupación por eso.

- ... Me da gusto - murmura y sigue manejando en silencio.

Robert es así, apresar de no saber lo que pasa realmente, el llevarnos al hospital y ver afectada a Alba lo hizo preocupar, tanto que estoy segura que se lo dijo a Ivy y por eso llegó con galletas hoy, ella hacia eso conmigo cuando me encontraba enferma.

Llegó al trabajo, me apuro con las cosas que retrasé y después salgo a la estación de policía para sacar a uno de mis clientes.

- ¿Podrías dejar de meterte en problemas? - le digo irritada al cliente - Este mes es la segunda vez que te saco de aquí.

- No es mi culpa haber crecido al rededor de delincuentes, pero eso no significa que se todo lo que hacen y por eso me traen aquí con regularidad, creo que quieren que sea quien les de información desde adentro, pero no lo haré, imbéciles.

Lo miro mal, no tengo pruebas, pero sé que no anda en buenos pasos, aunque tampoco creo que llegue a ser un gran peligro.

- Y por cierto, no te escuché llegar hablando de leyes como siempre lo haces - dice frunciendo el ceño - Siempre llegas alegando con los policías para que me dejen salir, pero hoy ni ellos ni tu parecían estar concentrados, fue tan rápido.

- ¿Te estás quejando porque te saque rápido? - pregunto sería.

- No me quejo, sólo digo que fue diferente y me hace creer que pierdes interés en mi - dice de broma - Pero hiciste tu trabajo , te haré llegar el pago.

- Claro...

El hombre sale corriendo para tomar un taxi dejándome ahí en medio de la calle.

- Dios, a veces me pregunto porque defiendo a este tipo de personas.

Cuestionar no es nada profesional, pero lo dejo solo para mí, así que no afecta mi trabajo ni mi reputación.

- ¿Me estás poniendo atención? - Nelly pregunta por segunda vez.

- Sí...

- ¿Qué dije?

Suspiro irritada, no tengo ni idea de que es lo que ha estado parloteando.

- ¡No escuchaste nada! - me descubre.

- No escuché, así que repite todo.

- No lo haré - dice indignada - Ahora dime qué te tiene tan distraída, siempre intentas ignorame, pero al final sales escuchandome y está vez parecía que habías olvidado que estaba frente a ti.

La miró mientras intento ponerle atención.

La verdad es que he estado pensando en Alba desde que salí de casa, no sé si se encuentra bien, aunque todo salió perfecto con sus resultados, siento que pude verse afectada emocionalmente.

- ¿Hay algo que te preocupa? - pregunta con más calma.

- Lo había - respondo - Pero resultó que salió todo bien... Es sólo que no logro concéntrarme.