~ DANEY ~ 30

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Miro fijamente hacia la mesa del hombre que le grita a Alba. El hijo de puta no acepta que su tarjeta no pasó y le exige que la pasen de nuevo porque piensa que es un error de la máquina.

- ¿Qué le pasa? - Rebeca pregunta.

Alba vuelve a tomar la tarjeta y se va haciendo caso de pasarla de nuevo en la máquina, pero poco después vuelve con una cara de pena, seguramente no volvió a pasar.

- ¡Prueba con otra! - el hombre le grita al verla regresar y le tira otra tarjeta en la mesa - Debe ser su maldita máquina o eres tú y no eres capaz de hacer bien tu trabajo.

No aguanto más ver esto, necesito intervenir.

- ¿Daney?

Corro mi silla para levantarme de golpe e ir hacia ese pedazo de basura, pero alguien se me adelanta.

- Oye imbécil, ¿si sabes que otras personas están intentando tener una cena tranquila.

Un hombre de la mesa de al lado le dice con enojo.

- ¿A quién llamaste imbécil? - el imbécil pregunta - Métete en tus asuntos.

El otro hombre no le hace caso, en su lugar mira a Alba y le sonríe.

- Cariño, ve a ver si esa tarjeta si tiene fondos, has que se vaya de aquí.

El pedazo de escoria reacciona, pero su acompañante lo detiene. Esa es la oportunidad que Alba toma para irse con la tarjeta que le dio.

Solo espero ese imbécil sea capaz de tener unos dólares en su cuenta, si no, seré capaz de pagar su cena para que saquen su culo de aquí.

- Daney - Mia me jala para que me siente adecuadamente - ¿Qué planeabas hacer? ¿Ir a golpear al hombro o qué?

La miró con mala cara, ¿por no deja de meterse dónde no debe?

- Su tarjeta pasó - Alba vuelve con el hombre - Aquí tiene.

- Te lo dije, debe ser tu maldita máquina - se levanta de golpe quitándole la tarjeta de mala gana - Adiós.

- Que tenga linda noche - Alba dice con amabilidad.

Todos alrededor miramos la escena, ¿cómo Alba fue capaz de guardar la compostura con un hombre tan desagradable? Ella fue amable hasta el final y eso solo me deja un peor sabor de boca.

- Mira la jugada que le harán a tu "empleada" - Mia murmura.

- ¿Qué? - pregunto.

- El hombre que la defendió, mira la jugada que hará - dice burlona - Me sé ese juego como la palma de mi mano, lo he visto varias veces.

- ¿De qué estás hablando? - no logro entender.

- Solo mira atenta como lo has hecho desde que la viste.

Miro atenta, pero Alba ya no está por aquí, ella fue de nuevo adentro.

- Aquí viene - Mia anuncia.

Alba sale y se dirige a la mesa del hombre que la defendió de aquel patán, le entrega la cuenta.

- Debe hacerlo antes de irse - Mia sigue susurrando hacia mí, como si yo entendiera de que está hablando - Justo ahí.

Y lo veo, por fin entendí a qué se refería. Ese hombre acaba de sacar lo que pareciera una tarjeta y se la da a Alba justo antes de seguir su camino para irse.

- Lo sabía, nunca me equivoco - Mia dice orgullosa de sí misma - Esa mujer llama mucho la atención, vi a varios hombres girar la cara cuando ella pasaba por su lado.

La amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora